Leyendas sobre Tronantes y Nuberos: Los genios de las tormentas.
Publicado por HEATHENPRIDE , domingo, 11 de septiembre de 2016 6:27
Algunas
leyendas que encontramos al norte de la peninsula Iberica son muy
antiuas, en mis ultimos relatos, me ha dado por presentaros a
criaturas y seres magicos de toda España, quiza mas de uno ya os
habreis dado cuenta de que se parecen mucho a otros muchos cuentos y
leyendas de muchas tierras lejanas, en especial a las leyendas
nordicas y celtas.
Hoy,
voy a hablaros de las leyendas referidas a los Nuberos o Tronantes
de Galica y Asturias, aunque tambien los encontremos en Cantabria o
el Pais Vasco, estas historias nos hablan de ellos como poderosos
brujos que gobiernan las tempestades. Se les representa como seres de enorme estatura, de piel oscura y largas barbas, a veces portan un cayado o unas zuecas de madera, con las que se dice que provocan los truenos al golpear el suelo, en algun caso, portan un mazo de madera (aunque esto no es muy frecuente) con el que golpean las montañas. Esto nos recuerda a la apariencia salvaje de dioses como Thor o el dios celta Tutatis, que tambien provoca truenos. En alguna ocasion, sin embargo nos recuerdan mas a enanos, de largas barbas y feo rostro, y de piel tambien muy tostada.
Hay
relatos realmente muy antigus de estos poderosos brujos, en este caso
según parece, el primer testimonio escrito en el que se habla de
estos temidos hechiceros refiriendose a lo que nombran como a un
tempestiario data de principios del siglo XIII o finales del XII
(siglo 13 o fin del 12 para los peques que no sabeis aun de numeros
romanos), es el manuscrito creado por los monjes con un largo y
complejo nombre en la lengua romana, el Latin, se llama algo asi como
"Narratio de Reliquiis a Ilyerassolyma ovetum usque
translatis".
Es
esta historia escrita aun a mano en tiempos muy antiguos, un relato
donde se habla del traslado de las Santas Reliquias de Jerusalén a
Oviedo y tambien se nos habla de la historia tenida por cierta de
una mujer llamada Aria que fue exorcizada en el templo del Salvador y
después bautizada por un tal "Obispo Gunscellus".
La
mujer conocida como Aria, tenia fama de poderosa hechicera y hablaba
después de ser comvertida al cristianismo de su vida de pagana, y de
como llena del poder “del demonio” , ejercia como bruja,(y una
vez mas, digo a los peques que estas leyendas son mucho mas antiguas
que la llegada del cristianismo, asi que seguramente sean recuerdo de
los antiguos dioses como Thor, el señor de las tormentas, que llego
a la peninsula con las tribus y pueblos paganos antiguos).
Asi
habla del daño que causaba a la gente como tempestiaria y de como
siete años atrás ella misma había provocado en pleno agosto tal
granizada sobre Oviedo que inundó a sus habitantes hasta las
rodillas, mientras ella volaba por los aires gobernando la
tormenta.
En la zona de Gumio (Boal), los Nubeiros eran una especie de brujos que leían hechizos en grimorios ( unos libros de Magia que solo poseen los brujos muy poderosos) y producían la tormenta a la cual ascendían subiendo por el remolino para dirigirla y asi descargar todo su poder donde ellos desearan. La forma que los cristianos encontraron para deshacerse del poder magico de estos brujos es llamar al poder de la iglesia, pues llegado el cristianismo, esta era ya la unica forma que había para conjurarlos, se dice que el procedimiento era que el cura les arrojase un zapato.
En la zona de Gumio (Boal), los Nubeiros eran una especie de brujos que leían hechizos en grimorios ( unos libros de Magia que solo poseen los brujos muy poderosos) y producían la tormenta a la cual ascendían subiendo por el remolino para dirigirla y asi descargar todo su poder donde ellos desearan. La forma que los cristianos encontraron para deshacerse del poder magico de estos brujos es llamar al poder de la iglesia, pues llegado el cristianismo, esta era ya la unica forma que había para conjurarlos, se dice que el procedimiento era que el cura les arrojase un zapato.
En la comarca de Grandas de Salime llegaban montados en la propia nube cargada de agua pero se dice que tocando las campanas de Vilabolle les obligaban a marchar puesto que aborrecían el sonido del bronce. Huían diciendo "¿Únde descargo os machos que m´arrevientan?", refiriendose a las nubes cargadas de granizo.
En
Pezós se cuenta que varios Nubreiros amenazaron a un paisano con
descargar el granizo sobre su tierra y echarle a perder toda la
cosecha, pero este les ahuyento rezando.
En
Vilanova de Bual se decía que vivía un Nubreiru, dicen de el que
era un anciano muy feo y muy negro, un día fue hasta Serandías en
una nube pero en el camino se encontró con otro Nubreiru que ya
venía de allí escapando del sonido de La Capielluda ( es decir, la
campana de Santa María de Serandías.
En Vigaña Arcellu (Belmonte) llegó un día un Nubeiru montado en su nube, y como todos los campesinos temian que acabase destrozando todo lo sembrado, decidieron frenarle, entonces mandaron llamar al cura para expulsarlo, conjurándolo, éste pidió dos ferradas (dos grandes recipientes de madera) llenas de agua y la ayuda de los cuatro hombres más fuertes del pueblo para que le sujetasen mientras hablaba con el tronante, no fuese a tirarlo el temporal. El Nubeiru posó cada uno de sus pies en las ferradas llenas de agua y preguntó con una voz ronca como un trueno donde se descargaba la nube: "¿Aou descargo, que m´arrevientan los machos?". El cura le ordeno que se marchase al Gallu Carrizeu y hacia ese pico alto se dirigió el Nubeiru. Al llegar a un lugar conocido como La Seita apedreó todo el granizo que llevaba de modo que allí nunca volvió a crecer vegetación alguna.
En
otra ocasión el Nubeiru tuvo que escapar sin descargar su tormenta
porque en San Martín de Cezana comenzaron a tocar las campanas
llamadas El Chucarón y La Perrucade Cezana. Se decía que el Nubeiru
vivía en los montes de León y que una vez le dijo a un rapaz que
estaba pastoreando por el monte " Si vas a Tudela pregunta por
Xuan Cabrita", se dice que este hombre era un poderoso brujo que
no creia en los santos y nunca pisaba la iglesia.
En Cesniye de Turón (Mieres) se cuenta que día de neblina se acercó al pueblo un Nubiru al que dieron hospedaje en una casa porque había bajado a la tierra y hasta que la neblina no se alzara de nuevo, no podía marchar. También en Turón en el Riquixu, un día cayó un Nubiru, pero se trataba de un hombre barbudo pequeño y oscuro, no de un gigante como se solia contar, una paisana lo tapó bien con una hoja de berza y le dio hospedaje hasta que pudo marchar montado en una nube. Dicen que agradecido, el pequeño tronante hizo llover manso sobre sus cosechas, asi que estas dieron buen fruto.
Y
es que aunque el Nuberu se aparezca a veces como una figura
fantasmasgórica y se nos presente como un brujo de proporciones
gigantescas, a menudo sucede que cuando baja a la tierra lo hace como
si de un pobre pidiendo limosna se tratase y según se portan con él
alla donde se le reciba ,así actuará en consecuencia con ese pueblo
descargando el granizo o la lluvia benefactora.
En
esto, se parece mucho a la figura que ya todos conoceis porque he
hablado de ella en muchas historias que ya os he contado, del dios
Odin, que solia descender a visitar a los mortales, y se dejaba ver
entre campesinos y gente humilde, al igual que su hijo Thor, el
poderoso dios de la tormenta y el trueno de los nordicos, ambos
ponian a prueba a los humanos, y dependiendo del trato recibido, les
premiaban o castigaban.
En
Artidiellu, Lligüeria (Piloña) cuentan que un rayo mató una vaca
en un campo y junto con ese rayo cayó de las nubes el Nuberu a
tierra, era un hombre muy feo, barbudo y como en algun otro caso
pequeño de estatura. Se encontró con dos rapacinos (dos niños
peqieños) que estaban cuidando el ganado, cosa comun en aquellos
tiempos, pues pocos niños tenian la oportunidad de aprender a leer y
escribir, asi que , al no acudir a las escuelas ayudaban en casa en
lo que podian, y una de las dedicaciones era la de pastorear .
Al
principio le tenían miedo pero él hombrecito les tranquilizó y les
dijo que se llamaba Xuan Cabrita (este es un nombre comun para los
brujos en Asturias), asi, que muy amablemente les pidió permiso para
pasar la noche en su cabaña, a lo cual los muchachitos respondieron
que si. Repartieron con él la leche y la boroña (pan de maiz) que
tenían. Por la mañana les pidió que hicieran fuego con leña verde
y mojada. Al producirse el humo negro y espeso, el Nuberu fue
escalando por él hacia las nubes para poder marchar se despidió de
ellos y les dijo "Si vais a la ciudá de Brita entrugais por
Xuan Cabrita". (Si vais a la ciudad de Brita preguntad por Juan
Cabrita).
Pasó
el tiempo y sucedió que uno de aquellos rapacinos se hizo hombre y
un día embarcó camino de Santiago de Compostela pero el barco
naufragó en una tormenta y agarrándose a un pedazo de madera del
barco destrozado , nadando llegó como pudo a tierra. Estuvo mucho
tiempo perdido y viviendo de la caridad en tierras desconocidas de
algun lugar entre Asturias y Galicia, hasta que llegó en su caminar
errante a un pueblo pequeño que se llamaba Brita,no le parecio mas
que una aldea, lejos de poder llamarse siquiera villa y desde luego,
nunca ciudad, pero se acordó entonces de la despedida del Nuberu y
preguntó a los que encontro en su camino cual era la casa de Xuan
Cabrita.
Al
llamar a la puerta de una modesta cabaña le abrió la mujer del
Nuberu que le dijo que su esposo no estaba y no podía recibirle
puesto que estaba de viaje y llegaría tarde. Le hizo pasar y aunque
no se mostro mala con el, como pudo le encerró en un cuarto muy
oscuro lleno de humo y hollin. Cuando el Nuberu regreso a su casa era
tarde ya,llegó de noche, y nada mas entrar en su morada le dijo a su
mujer que olía a "cristianuzu" pero su mujer le dijo que
era un hombre que según le habia contado, venia de Lligüeria y que
aseguraba que le había conocido en la Canga Xuangayu.
Entonces
el nubero hizo memoria y dijo el llamado Xuan Cabrita: "Coimes,
esi home entós, ye amigu míu, non a esi nun se mata non".
(Como este hombre es entonces amigo mio, asi no se le mata no). Sentó
al mozo a cenar con él a la mesa y estuvieron hablando de muchas
cosas, al preguntarle por su tierra le contó que precisamente venía
de Lligüeria de descargar una nube de granizo sobre la montaña, ya
que aunque no lo entendiera, era necesaria para hacer crecer los
regatos y que estos llenasen de vida los campos, y que al pasar sobre
su pueblo habia oido contar que la esposa del mozo se iba a casar
nuevamente porque allí pensaban que había muerto y todo el pueblo
pensaba que ella era viuda.
El
buen mozo se preocupó mucho y se sentia muy abatido porque no podía
impedir la boda puesto que se encontraba a muchas millas de
distancia pero Xuan Cabrita le tranquilizó. Prometió llevarlo
volando subido sobre él por los aires y regresarlo a casa. Le dio un
pincho de carne con tres puntas y le dijo que le fuera espoleando
con él como si fuera un caballo diciendole "Arre demoniu, arre
demoniu" pero que no se le ocurriera nombrar ni a Dios ni a los
Santos porque entonces lo arrojaba al suelo.
Volando
por los aires llegaron inmediatamente a Lligüeria, ya era de mañana,
y justo pudieron divisar a toda la gente que se acercaba a la plaza
del pueblo en el momento antes de entrar en la iglesia para realizar
la boda. En ese momento al rapaz se le escapó decir: "Ay Dios
mio ya veo el mío pueblu". En ese preciso instante el Nuberu
pegó tal sacudida que le descabalgó arrojándole al suelo, a pesar
de todo tuvo suerte ya que ya iban descendiendo y apenas cayo desde
un puñao de metro de altura y consiguió quedarse enganchado en un
árbol próximo a la iglesia por lo que tan solo sufrió arañazos y
descendiendo de el, la emprendio a voces llamando a su mujer y esta
al reconocerle,se separo del hombre con el que iba a casarse, solo
para poder alimentar a sus hijos. Dicen que, despues de esto, los dos
fueron felices, pero que al nombrar a Dios, el nubero jamas volvio a
presentarse cerca del pueblo y el joven nunca volvio a verle.
En
Galicia , las historias de Tronantes y Nubeiros son tambien muy
parecidas, no voy a contar mas que hablen de nuberos malos y de curas
hecandoles tocando la campana del pueblo (ya que se parecen mucho a
las leyendas Asturianas), si os contare que hay algunas diferencias,
por ejemplo, en mi tierra gallega, al tronante, se le hecha llamando
al cura que lee el libro de misa al reves, o un libro que llaman “o
libro de ler e desler” (el libro de leer y desleer), donde aparecen
muchos conjuros para derrotar a toda clase de criaturas oscuras.
Con
todo, no siempre los nuberos o tronantes han sido malos, o “demonios”
como se cuenta en las leyendas que nos han llegado, en alguna leyenda
antigua de Galicia, se habla de una mujer llamada Xoana que tiene una
hija pequeña. Al parecer, esta mujer esta ya muy mayor y enseña su
poderosa magia antigua a su pequeña Xoaniña, que ya desde muy niña
aprende a dominar el poder de crear tormentas.
De
este modo, la pequeña ayuda a evitar mas de una sequia en el pueblo,
aunque en una ocasión destroce una cosecha de un mal vecino que la
apedrea llamandola “a filla da bruxa” (la hija de la bruja) .
Cuentan que en una ocasión, desembarcaron en la aldea de la niña,
unos piratas (la leyenda dice a veces que eran “moros” (esta
podria ser la version mas antigua), en otros casos se dice que eran
invasores portugueses.
La
niña se presenta sin miedo en medio de la plaza vacia, pues todos se
habian refugiado en sus casas por miedo, y arrodillandose, hace pis
en el suelo, donde la pequeña habia hecho pis, aparece una enorme
columna de polvo, que crea una densa niebla, y tras de ella, una
tormenta . Los piratas se pierden en medio de la niebla y no
encuentran el pueblo, y al embarcarse, ella descarga desde la orilla
todo el poder de la tormenta sobre ellos, con lo que , a duras penas
escapan para no regresar jamas.
Otra
leyenda muy similar, mucho mas moderna , nos habla de las tierras de
Castilla (en alguna version dicen que sucedió cerca de lo que hoy es
Madrid), tomadas por las tropas Napoleonicas (Napoleon fue un gran
general Frances que a punto estubo de conquistar España). La
historia nos habla de un hombre joven que pertenece a las milicias
que como pueden, hacen frente a los franceses, escondiendose en las
montañas.
Se
dice que este joven estaba enamorado de una joven tabernera, que como
puede, sobrevive en un pueblo tomado por los franceses, el baja de
las montañas y no sin correr mucho riesgo, acude a ver a su
enamorada en un cobertizo abandonado a la salida del pueblo. Luego,
antes de que salga el sol, se retira atravesando los campos, hasta su
refugio con la milicia en las montañas.
En
esta ocasión, al retirarse, encuentra en medio del campo a una niña
pequeña, esta como en el cuento anterior, haciendo pis de cuclillas
en medio de un campo, asi que el muchacho le dice que se vaya
corriendo a casa, que los franceses vigilan los campos de dia, y que
corre el riesgo de que la disparen... la niña le sonrie y le saluda
con la mano... y cuando vuelve a mirar atrás para ver si sigue aun
alli, la pequeña ya ha desaparecido...
Sin
embargo, ve a lo lejos una larga columna de soldados, carros,
caballos y hasta artilleria..sin duda son los franceses que avanzan,
asi que el pobre joven corre como una liebre hasta las montañas a
avisar a sus amigos, que se ven atemorizados, pues dicen que los
franceses son tantos que han tomado todos los caminos, asi que estan
totalmente rodeados en la montaña...
Desde
el alto observan los campos llenos de tropas...y a lo lejos,justo
donde estaba antes la pequeña, una enorme columna de polvo
levantandose del suelo, y sobre ella, unas enormes nubes de
tormenta...
No
tarda en desatarse una tremenda tronada, y los franceses corren
asustados de aquí para alla, incapaces de encontrar refugio en las
casas del pueblo, cerradas a cal y canto para que no entren...asi que
acaban empapados de pies a cabeza.
Al
amanecer, descienden de la montaña los milicianos que atacan, con
los mosquetes cargados de polvora perfectamente seca, escondida como
estaba dentro de las cuevas, mientras que los franceses huyen
despavoridos abandonando todo a su paso, cañones, carros con
provisiones e incluso armas que de nada les sirven pues no disparan
con la polvora mojada por la tormenta.
Desde
entonces se cuenta en muchas historias distintas en Castilla, la
leyenda de la nuberita POLVORILLA, o la historia de la Meonceta.
Como
veis, estas historias son muy antiguas, quiza como he dicho sean
recuerdo de dioses paganos de las lluvias, tan necesarias para las
cosechas, o recuerdo de los viejos dioses de las tribus que llegaron
a hispania en el pasado, que adoraban con otros nombres a Thor...el
dios de las tormentas.