Odyndis y la manzana de Idunn

Publicado por HEATHENPRIDE , jueves, 2 de septiembre de 2010 1:15


Cuentan que habito en las tierras del norte un hombre justo, en su juventud, fue valiente y aventurero y llego a ser un bondi notable por medios propios. Con el tiempo, su fama y fortuna le convirtieron en el cabecilla de todos los bondis del fiordo, pues nadie poseia mas fortuna y posesiones que el Houding Einar. De esta forma, no fue nada fuera de lo esperado, que en la asamblea del Thing, se le propusiera como candidato a Konungr. Era ciertamente el mas dotado, justo en sus decisiones, con la suficiente fama y fortuna para ser respetado por todos. Asi que, tras un primer año de mandato, tras el cual, la paz y la properidad sonrieron a las gentes del fiordo , nadie vio inconveniente en volver a encumbrarle sobre la roca sagrada, un año mas, y asi fue, ciertamente sucediendo, año tras año, pues todos tenian al Konungr Einar por hombre sabio y justo.

Pero incluso los hombres justos, envejecen, y a Einar, le sobevino una rara enfermedad, para la que todos los chamanes, vitkis y seidrkonas, no encontraron remedio. Las laeknir se afanaban por mantener al monarca con vida, de todos era bien sabido que sus dias de vigor habian quedado atrás y perdia fuerzas dia tras dia.

Con las noticias de la debilidad del Konungr, empezaron a aparecer las intrigas para apropiarse del trono y de todas las granjas del fiordo, bajo el mandato de un mismo señor. Angot habia sido desde siempre el rival de Einar, habia logrado igualmente en su vida amplias riquezas y posesiones, pero estaba lejos de poseer fama y renombre, es mas, muchos le detestaban por sus metodos, pues no vacilaba en traiciones y engaños para medrar a cualquier costa. Y ahora con el Konungr Einar, muy enfermo y posiblemente al borde de sus ultimos dias, veia la oportunidad de reunir en torno a si a todos los apoyos que pudiese reunir de buen grado, o sobornando a quien hiciese falta, para proclamarse señor del fiordo con, o sin el apoyo de la asamblea.

Pues no habia en el linaje de Einar un varon que heredase sus derechos. Sus tres esposas, no le habian dado varones, de la primera, la hermosa aun en su madurez, Ygwen , tuvo a Katla, dicen que, la reina del fiordo, acudio con su hija desde tierras lejanas, para desposarse con Einar, y sellar un fructifero pacto entre dos poderosos linajes. Las malas lenguas, murmuraban acerca de la dudosa paternidad de Einar , ya que Katla era sin duda tan bella como su madre, pero no habia heredado su buen juicio y su buen carácter. De su segunda esposa, Helgerd , nacio Svara, que sobrevivio a un parto duro, no asi, su madre que fallecio al traerla a la vida. Crecer al lado del carácter arisco y seco de su hermana, que no paraba de hacerla sentir una segundona, no hizo sino convertir a Svara en una joven caprichosa y malcriada. Ambas en edad casadera, ambas aun sin compromiso, pero ambas tan distantes, que pocos apostaban a que el Konungr las desposase antes de su muerte.

De la ultima hija de Einar, poco se sabia, decian que era Odyndis la mas joven y hermosa de todas, tenida con una campesina de la que el monarca se encapricho. Criada lejos de la corte, pero a la vez secretamente atendida en la granja de su madre, a la que Einar hacia frecuentes visitas secretas, se creia, que el buen juicio del Konungr queria preservarla de este modo, de la negativa influencia de sus hermanastras, a las que ya no lograba enmendar.

Asi, la salud del Konungr se deterioro tanto, que ya todos daban por seguro que no veria la luz de una nueva primavera. Y entonces fue, cuando Angot , decidio jugar su baza. Envio a la morada del monarca a su hijo Vigort, joven y fuerte y de bella planta, semejaba un Jarl nordico . Pero su apariencia noble, encerraba un corazon mas frio y mezquino aun que el de su padre. Cortejo sin muchos disimulos a ambas doncellas, y aunque a ambas no les resulto indiferente, finalmente fue Katla la que acabo por captar el interes del joven, que, una vez encontro colmado su objetivo de seducir a una de las dos, no tardo en mostrarse frio y distante con Svara.

Pero esta, aun resentida y dolida por el desprecio de Vigort, no tardo en hallar consuelo en otros brazos, pues, con su madrastra la reina Ygwen constantemente ocupada en la salud de su esposo ya muy mermado en fuerzas, se veia libre para buscar esposo ella misma. Asi, no tardo en frecuentar cuanto banquete de cierta clase, se ofreciese en las haciendas de los ricos bondis, y ciertamente, la voz de que, la hija del Konungr estaba aun disponible y con ella una amplia dote, atraia a hombres de toda clase y condicion como la miel a las moscas.

Hubo aventureros que habian hecho cierta fortuna en tierras lejanas como vikingos, hijos de algun poderoso bondi, e incluso algun Jarl que la pretendieron, y ella se mostraba caprichosa y tonteaba con todos, sin decidirse por ninguno. Hasta que aparecio Bodarr , un Jarl cubierto de tatuajes y aros de plata en sus brazos, de aspecto fuerte y rudo, indudablemente, un poderoso señor de la guerra. Y ella no buscaba tanto un hombre apuesto, sino un brazo fuerte que pudiese igualar el pulso que mantenia con su hermana...Y Bodarr era el candidato perfecto.

Ambos pretendientes, se conocieron en un banquete en el gran hall de Einar, y aunque no se soportaron desde el principio, prefirieron mantener las apariencias de cordialidad . Asi, una noche, y ya despues de que todas las laeknir y los chamanes hubiesen fracasado en hallar cura alguna para la enfermedad del Konungr , se presento en la corte, una extraña anciana de oscura apariencia, cubierta por una capa hecha con plumas de cuervo, y adornada con collares de huesecillos de animales, que despues de examinar al Konungr y administrarle una pocima, aseguro que esta le mantendria con vida, hasta la proxima primavera, no mas. Pero ante el pasmo de todos,en el banquete de esa noche, declaro conocer un remedio que podria devolver a Einar la salud y el vigor, aunque se encontrase en tierras remotas, mas allá de los confines de las tierras que todos los marinos nordicos conocian, La anciana relato los pormenores del viaje, hacia la fria marca helada en el mar del Norte, donde las nieves eran perpetuas y siempre era invierno, y como alli, encontrarian el remedio a la enfermedad del monarca en la fuente de la eterna juventud.

No es necesario decir, que no sirvieron de mucho, las advertencias sobre los muchos peligros que entrañaba el viaje y insistir en que, se enfrentaban a lo desconocido, enseguida, se levantaron los dos pretendientes, y casi al unisono , se presentaron voluntarios para emprender la peligrosa mision en nombre del Konungr, entre los victores de todos los congregados.

A ninguno de los dos, se le escapaba que, su fingida colaboración no escondia mas, que la ponzoña de la traición, Katla no veía la hora de hacerse con esa medicina milagrosa,con ella, podria garantizar el reinado de su amante Vigort en cuanto falleciese su padre. No le importaba en absoluto la fama de crueles que poseian los del clan de Angot, al fin de cuentas, la union de los dos linajes, le convertiria en la reina del Konungr mas poderoso de los fiordos, y era solo cuestion de tiempo, que todos se arrodillasen ante su poder. Tampoco Svara tenia la menor intencion de usar el remedio con su padre, siempre la habia tratado como a una niña que necesitase constantes mimos, quiza sintiendose culpable del fallecimiento de su madre natural, aunque, bien es cierto, que siempre la habia criado como hija legitima, pero Svara pensaba que, el tiempo de su padre habia pasado, y que el fiordo necesitaba una mano fuerte para gobernar. Bodarr convertiria las tierras bajo su tutela, en el land mas poderoso, por derecho de conquista, todos le rendirian tributo, porque solo el conquistado se somete docil, el apaciguado con buenas palabras, finge sumision, pero conspira en la sombra.

Asi, al amanecer siguiente, todo el fiordo bullia en preparativos, el gran navio de combate de Bodarr fue el elegido para la mision, era un soberbio Langskip bautizado como Svartormr. Angot no escatimo gastos para dotar al navio con los mejores petrechos, al fin de cuentas, su hijo Vigort partiria en el, y era necesario que no le faltasen medios.Ambas partes, siguieron escenificando su colaboración, y se esmeraron en preparar la expedicion en el minimo tiempo posible. Angot envio a una seidrkona seguidora del culto a Loki, para propiciar el apoyo de los dioses, y de ambos bandos, surguieron brazos animosos para la empresa. Vigort reunio una mitad, la otra, la componian los guerreros de Bodarr, que no quisieron abandonar a su jarl y se aprestaron para la aventura.

De esta forma, partieron con la caida de la tarde, sin demora alguna, pues aunque ambas partes alegaron que el tiempo apremiaba para salvar la vida del Konungr, realmente sabian que, la reina no se quedaria de brazos cruzados, y armaria su propia expedicion, asi que, querian asegurarse llegar a la meta de su aventura, antes que los partidarios de Ygwen. No hubo tiempo para consultar oraculos, ni para presentar a los dioses un blot propiciatorio. En cuanto el navio estuvo preparado, todos embarcaron y se hicieron a la mar.

Pero nadie viaja a los confines del mar conocido, sin prestar el debido tributo de respeto a Aegir y Ran, la diosa de la rapiña. La misma madrugada de su salida, los mares se alzaron furiosos, incluso Njörd , el señor de los vientos, parecia encolerizado y dispuesto a castigar la sobervia de los hombres, zarandeando la nave, que pronto fue un juguete de las olas, altas como montañas y los furibundos vientos. Durante toda una noche, la tormenta se cebó sobre la nave y para cuando, con la llegada del alba, la mar se calmo y los vientos reposaron, ya Ran se habia cobrado su tributo con muchas vidas que desaparecieron en los oceanos para siempre. Al menos media docena de valientes pasaron a servir en los salones sumergidos de Aegir y su esposa, pero los que habian sobrevivido a aquella noche de espanto, tenian ahora que afanarse en achicar el agua de la nave, y en propulsar el barco a remo, ya que, la tormenta habia quebrado el mastil de la nave y la habia convertido en una gran barca que solo contaba con la fuerza de los brazos y los remos para navegar.

Con los mares en calma, remaron sin un rumbo concreto, pues la tormenta les había zarandeado y desviado de toda ruta conocida, hasta que vieron a lo lejos, las playas de una tierra ignorada , cubiertas de despojos de las tormentas. Un panorama ciertamente terrible y desolador, los esqueletos destrozados de muchos navios, poblaban la playa hasta donde alcanzaba la vista, pero con todo, el Svartormr precisaba de severas reparaciones antes de hacerse de nuevo a la mar, asi que, la parada era obligada, para que los smithr pudiesen trabajar y remediar en lo posible los daños de la tormenta. Asi, vararon en la playa, y se dedicaron a explorar los cascos abandonados de las naves alli encalladas, muchas de ellas ya muy podridas, otras, mas recientes, aun con maderos en condiciones de ser aprovechados. Y en la busqueda de materiales para la reparacion, descubrieron con estupor, que, si bien no habia rastro de vida alli, salvo ratas y algun ave marina, las bodegas de mas de una nave, albergaban todavia material en buen estado, las telas y pieles, estaban ya podridas en su imensa mayoria, y no fue facil encontrar con que, confeccionar una nueva vela, sin embargo, encontraron cajas repletas de marfil de morsa, y ambar, y algunas piezas de orfebreria, como copas y platos o collares de cuentas, que bien embalados , descansaban entre las maderas podridas, y habian soportado el tiempo en buen estado.

Un tesoro que, una vez acumulado sobre la arena de la playa, podria llenar la panza de un navio, y desde luego, colmar de monedas de plata media docena de cofres. Un botin digno de un jarl, que nadie reclamaria y que no tardo en desatar la codicia de muchos. Porque Vigort declaro que, no habia sitio en el navio para ninguna carga inutil, dado que se enfrentarian a un viaje hacia lo desconocido y convenia hacerse a la mar de nuevo, con la nave lo mas ligera posible. Sin embargo, Bodarr y los suyos, acostumbrados a repartirse el botin tras los saqueos, estimaban que solo un necio dejaria atrás tal tesoro, de tal cuantia, que, incluso si fracasaban en su mision, su venta les garantizaba volverse lo suficientemente ricos como para considerar que el viaje habria valido realmente la pena.

Asi, empezaron las discusiones, y el rechinar de dientes, y en poco tiempo, la mascara de cordialidad se cayó, y ambos bandos se dividieron. Pronto la playa, se convirtió en un campo de batalla, y en pocos minutos, muchos hombres habían entregado su alma a Odin. Para cuando la cordura regreso a entre los combatientes, ya la expedicion se habia reducido a la mitad, pues ambos bandos habian perdido muchos hombres, y los restantes, apenas bastaban para tripular minimamente una nave.

Mientras, en la corte del fiordo, se presento una jovencita, de apenas 15 primaveras, acompañada de un muchacho de su misma edad. La reina se sorprendio bastante de encontrar alli a Odyndis, si bien conocia su existencia , pero no la habia visto en su vida. Ahora, la muchacha se presentaba, acompañada de Ovard , un joven hijo de un viejo amigo del Konungr Ragnar, hablando de una anciana que se había presentado en la granja de su anciana madre, y despues de hacer una serie de profecias, la conminó a ponerse en camino hacia la corte . Asi, los partidarios de la reina Ygwen y leales a Einar, entendieron que, la muchacha habia sido elegida para llevar a cabo la misión de traer la cura para el monarca, y no tardaron en presentarse voluntarios muchos brazos para tripular el Ravnhoude , el sobervio langskip del Konungr Einar, y hacerse a la mar en busca de la milagrosa cura. De este modo, se tomaron su tiempo para hacer todos los preparativos para el viaje , y para honrar a los Dioses con un blot en honor de los dioses de los oceanos al que asistieron todos los miembros de la expedicion, Una vez, cumplido el deber de propiciar a los dioses, se hicieron a la mar, y encontraron el oceano en extraña calma, no soplaba ni un ápice de viento, así que, la vela no les sirvió de nada y tuvieron que tirar de coraje y fuerza, y esforzarse a los remos.

Odyndis y Ovard, se situaron en pie a proa del barco, escrutando un horizonte que, se iba cubriendo de una niebla cada vez mas espesa, hasta que, llegaron a encontrarse envueltos en un manto de blancas brumas , y se vieron forzados a navegar lentos, pues no habia forma de orientarse ni de tomar referencia alguna en el cielo o la tierra. Asi, pasaron la noche entera , bogando con ritmo lento, y cantando viejas swirlungas, las tonadas marineras, para mantener firme el animo. La madrugada fue dejando paso a un amanecer radiante, donde, inexplicablemente se vieron arrastrados por una poderosa corriente, aunque, la ausencia total de viento, seguia siendo extraña y casi sobrenatural, en unos mares frios, y donde se supone que reina Njörd, que, misteriosamente, ese amanecer, parecia dormido. No sirvió de nada tratar de enmendar el rumbo, y remar con impetu para intentar salir de la corriente que les arrastraba, solo conseguían fatigarse inutilmente. Finalmente, recogieron los remos, y tras rezar al unisono una oración a Aegir y Nijörd , se encomendaron al capricho y la protección de los Dioses.

De esta manera, fueron arrastrados hacia una playa llena de esqueletos de barcos de diversa procedencia. Gylfi, uno de los mas veteranos marineros del Ravnhoude, comenzo a narrar un antiguo mito, que hablaba de un lugar misterioso, llamado “el osario de Ran” o “Rekiland” , la tierra de los despojos. Según esta leyenda, Ran arrojaba a las playas de esa tierra perdida, los restos de los navios, tras las tormentas, y todas las posesiones que restan en ellos, le pertenecen, son su tributo, y se dice que, a cualquiera que se apropie de parte de ellos, le perseguira la desgracia, pues Ran se cobrara venganza tarde o temprano, y pasara a formar parte de las legiones de haugbui, los fantasmas de los muertos, condenados a vigilar eternamente las posesiones de la Diosa.

Sabian que, la corriente les arrastraria irremediablemente a las playas, y la diosa les pondria a prueba , asi que se prometieron entre ellos, no apropiarse de nada de lo que viesen en la playa, por tentador que fuese el objeto, para no desatar las iras de Ran.Desembarcaron en cuanto la corriente les empujo a la costa, y alli, se entretuvieron en recoger restos de maderos secos, con los que encender un fuego y preparar una cena consistente, para alejar el frio y el cansancio de sus entumecidos huesos. Ciertamente, los exploradores, encontraron entre los restos de los navios, mercancias de gran valor, marfiles, tallas en maderas exoticas, piedras preciosas y abalorios, incluso armas con incrustaciones de plata, dignas de un Jarl, pero, tal y como habian prometido, se vigilaban unos a otros, para no caer en la tentacion de apropiarse de nada. Incluso, acabada la cena y una vez, todos calientes alrrededor del fuego, Gylfi, tomo la palabra y extrayendo de su cinto, un sobervio puñal con rempuñadura labrada en marfil de morsa, lo deposito sobre la arena de la playa y dijo solemne “Acepta noble Ran, señora de los oceanos, este humilde presente, a cambio de las maderas que consume el fuego, y calientan nuestros huesos, y permitenos continuar camino, para cumplir con la mision que nos ha sido encomendada”.

Al amanecer de la mañana siguiente, volverion a embarcarse, no sin que antes, Gylfi y Odyndis registrasen uno a uno a todos los hombres, y se dejasen registrar igualmente, pues era conveniente cerciorarse de que nadie habia sucumbido a una mala tentacion que pusiese en peligro a todos, provocando con su avaricia, las iras de Ran. En cuanto empujaron la nave a las aguas, y se alejaron un poco de la costa, empezo a soplar un viento muy marinero, propicio para navegar rumbo al norte y todos supieron que, Aegir y su esposa Ran, les consideraban dignos y les concedian su favor.

Muy distintas fueron las cosas, para la maltrecha tripulacion del Svartormr, donde la excasa tripulacion sobreviviente de la lucha en la noche anterior , aun dividida en lealtades entre Vigort y Bodarr, embarcaron en la nave, junto a algunos cofres repletos de objetos de valor, fruto de la rapiña entre los despojos. No bien hubieron abandonado la playa, se vieron inmersos en una ventisca fria y cortante como cuchilla, que dificultaba su avance, asi que, se vieron obligados a remar con el viento en contra y ateridos de frio.

Cuando la fria ventisca se transformo en un gelido viento del norte, que arrastró a la nave a un mar plagado de tempanos de hielo flotantes, los marineros tuvieron que hacer enormes esfuerzos por mantener los hielos lejos del casco, y la tarea se hizo harto dura y penosa para una tripulacion exausta de remar contra el viento durante largas horas, antes de que, Njörd dispusiese un cambio en la direccion de los vientos y estos hinchasen las velas, propulsando la nave hacia un peligroso mar de hielos. Pronto se vieron rodeados de hielo flotamte, cortante como cuchillas, y se vieron en la obligacion de intentar arriar la vela, obligados por el recio viento, que amenazaba con estrellarles contra los tempanos. Pero cansados, medio helados por el frio , no acertaron a hacerlo, antes de que, varios bloques helados impactasen contra la nave, y abriesen una brecha en el casco por la que, poco a poco, se fue anegando el barco. Ahora, Bodarr y Vigort discutian airadamente una vez mas...era preciso aligerar el barco de carga, para alcanzar a duras penas la costa helada que tenian justo enfrente, pero los mercenarios del jarl Bodarr no querian deshacerse de los tesoros encontrados en la playa, hasta que Vigort grito “son los cofres o nosotros...quien desee entrar esta noche a formar parte de la guardia del palacio de Ran, puede quedarselos”.Ya con el navio muy escorado y semihundido, Ran recupero sus pertenencias, y se cobro la vida de algun otro desdichado, que cayo a las aguas gelidas, y ante la imposibilidad de nadar por hallarse medio congelado, y la excasa maniobrabilidad de un barco semihundido, se perdio para siempre en las profundidades del oceano gelido.Todos consideraron desde luego, un milagro alcanzar tierra firme, ya con la nave peligrando seriamente, y con la tripulacion afanandose en achicar agua...

Las reparaciones podrian tapar a duras penas la brecha, pero el navio estaba ya en muy mal estado, como un hombre al que han roto las costillas. Un vendaje, le permite caminar, pero no luchar, del mismo modo, la nave aguantaria a duras penas una navegacion en un mar en calma, pero seria una tumba flotante con la primera muestra de la furia de Aegir. De una forma u otra, no fue en absoluto alentador, llegar a tierra, y encontrarse solo una basta extension blanca ante ellos, donde reinaba una eterna ventisca de fria nieve . Decidieron descansar un noche al pie de la playa, afanandose en varar un barco que, ya no sabian si podria llevarles de regreso a casa.

Toda una noche a la intemperie, sin forma de resguardarse, mas que, al pie del casco del navio, y sin leña seca para hacer un fuego, no es la mejor definicion de “descanso”, pero tras la larga travesia y la dureza de los ultimos dias de mar no se sentian con fuerzas para continuar viaje.Al menos, el amanecer, se mostro un poco mas amable, y dado que, nada podian hacer en la playa , decidieron tomar todo lo posible para el camino, y a duras penas, emprendieron la marcha.Muchos hombres se sentian debiles y enfermos, y de poco servian los conjuros de la seidrkona oscura, ciertamente, Loki no parecia favorecerla en aquel desierto helado, y era tan vulnerable al frio y las inclemencias como el resto de la expedicion, que a duras penas continuaba el avance por la llanura helada.

Tras muchas largas horas de vagar por el manto de nieves y hielo, divisaron incredulos a lo lejos, lo que parecia ser una fina columna de humo , lo que indicaba un minimo resquicio de vida en aquellos páramos perdidos, asi que, hacia alli se encaminaron . Les costo aun, muchos esfuerzos alcanzar su meta, una destartalada cabaña de aspecto tan miserable que, era sin duda un prodigio que se mantuviese en pie, en aquellos parajes, y con los vientos gelidos golpeando sus paredes sin cesar...

De su interior, salio una anciana de aspecto andrajoso , que muy contenta por recibir visita, les hizo pasar para compartir una sopa agria, de pesimo sabor, pero al menos caliente. Tras la cena, todos se acostaron como pudieron, pues mas de una docena de hombres , apenas cabian en la cabaña, pero al menos, era un cobijo para las inclemencias del tiempo. Por una noche, Bodarr, Vigort y los suyos, descansaron bajo un techo, aunque no pararon de quejarse de l mal olor y de que la anciana, no parecia estar muy bien de la cabeza. Con el amanecer ya alto, se sorprendieron de encontrarla fuera, la ventisca habia cesado, aunque el frio seguia siendo igual de recio. Sostenia en su mano, un puñado de semillas secas y reclamaba ayuda para sembrarlas en su jardin. Todos sin exepcion se burlaron de ella, zarandeandola, hasta hacerla caer al suelo. Luego se introdujeron en la choza, y saquearon cuanto creyeron pudiera serles util en la marcha, tras lo cual, abandonaron el lugar, perdiendose en la imensidad de la llanura blanca. Mientras, la anciana se habia incorporado a duras penas, para observar como desaparecian a lo lejos. Sus ojos apagados, cobraron entonces el brillo de una llama joven, y sus cabellos blanquecinos, se volvieron sedosos y brillantes como los destellos de Sunna, las arrugas de su rostro, se suavizaron y tomaron la tersura de la piel de la manzana madura...Y la voz, antaño cascada y seca de la anciana, se tornó en eco juvenil, mientras sentenciaba “Que el wirm juzgue la dureza de vuestros corazones”.

Igualmente, Odyndis , Ovard y demas componentes de la tripulación del Ravnhoude, llegaron a los gelidos mares cubiertos de hielos a la deriva, impulsados por buen viento, aunque, tomaron la precaucion de arriar la vela, antes de verse rodeados de las enormes masas flotantes. De esta forma, reanudaron la navegación a remo, y apostaron a los costados del barco, hombres que se afanaban en apartar los tempanos del casco, empujandolos con sus lanzas. Con todo, la marcha se hizo lenta y harto dificil, hasta alcanzar la costa, agotados tras muchas horas de remo y lucha con los hielos. Vararon la nave, y saltaron a la imensa playa de hielo y nieve, tras la cual, solo se divisaba una basta imensidad blanca, azotada por la ventisca y la nieve. Al menos, se tomaron cumplido tiempo para efectuar preparativos, preparando un pesado trineo que cargaron con leña seca, capas de piel y comida y agua para un buen trecho del viaje. Seria sin duda una dura prueba arrastrar la pesada carga a lo largo del desierto de hielo, pero nadie dudaba que, agradecerian disponer de leña y abrigo en la noche, pues no se veia resguardo alguno en el amplio horizonte.

Y asi, emprendieron la marcha, azotados por vientos helados constantemente, rumbo hacia ninguna parte, y a ritmo penosamente lento, pero al menos, dispusieron de un buen fuego y alimentos para reponer fuerzas, arropados por las pieles, en las excasas horas de descanso que se permitieron antes de retomar la marcha. Tras incontables horas de marcha, divisaron la misma columna de humo que antes habian encontrado Bodarr y Vigort y su gente, y con lentitud y fatiga, les llevó el resto de la jornada, alcanzar la vetusta cabaña, ya con la caida del crepusculo.

Alli encontraron a la misma anciana mugrienta, que les recibio con las mismas muestras de alegria demente, que a sus anteriores visitantes, y se ofreció a compartir su sopa con un grupo bastante mas nutrido que el anterior. Odyndis y los demas, decidieron celebrar una buena cena en la cabaña, y no dudaron en aportar buena parte de sus reservas de comida para preparar una cena decente que dejo satisfechos a todos, tras lo cual, se arroparon en sus pieles y descansaron a cubierto, en compañía de la complacida anciana. Al amanecer, la encontraron fuera, esperando, con las semillas secas en la mano, reclamando ayuda para sembrar su jardin. Odyndis, se apiado de ella, y acercandose, le susurro que, ella le ayudaria a plantar sobre la nieve aquellas semillas, pero que el frio no las dejaria crecer. La anciana sonrio y cuando abrio su puño, sobre la palma de su mano, Odyndis vio incredula unas semillas verdes, y cuando la anciana le susurro “mira bajo tus pies”, se encontro pisando un manto de fina hierba verde. Ante los ojos de todos, la anciana se tranformo, en una bella joven de dorados cabellos, que les indicó que, lo que tan ansiosamente estaban buscando, se encontraba a no mas de dos jornadas de camino, tras las montañas. Les explico, que el prodigioso remedio, permanecia guardado por el wyrm, y que contra esta criatura, de poco servian las armas, tan solo habia que encontrar en el corazon, la llave que te franquease el paso bajo sus ojos vigilantes. Dicho esto, tendio la mano a la joven Odyndis, y de ella, resbaló una nuez, que la muchacha recogio en las suyas, aun sorprendida. “Usala solo cuando todo parezca perdido”...y diciendo esto, la joven desaparecio ante los ojos de todos, iluminada por un potente resplandor, y con ella, la choza y todo lo que habia indicado su presencia.

Bajo los pies de Odyndis, el suelo volvia a ser hielo, y durante un buen rato, todos murmuraron, acerca del extraño encuentro, con la que todos aseguraron, era una emviada de los Dioses, sino una Diosa en si mima. Ovard fue el primero en sugerir la necesidad de ponerse de nuevo en marcha, aprovechando la ausencia de la molesta ventisca que tanto dificultaba la marcha, asi que, todos se pusieron de nuevo en camino, arrastrando el trineo, ahora mas ligero de peso, tras el banquete de la noche anterior, y ya casi vacio de provisiones, leña y pieles, que todos portaban encima para soportar el intenso frio.

En la imensidad de las nieves, duerme el Wyrm...el gusano de los hielos , tan largo como un langskip , con una coraza de escamas tan duras como el mejor skjöldr de tilo y con dientes tan cortantes y afilados como un sax. Dicen que, se alimenta de almas oscuras como la pez, y que puede dormitar siglos esperando a su presa.Odyndis y todos los demás avanzaban a marchas forzadas, pues la muchacha presagiaba algun destino funesto para Vigort , Bodarr y sus seguidores. Y ciertamente su presentimiento se hizo dolorosamente real, al encontrar a su paso, la nieve teñida de rojo por doquier, y ni rastro de la espedicion que les precedia. . Gylfi y Svein , dos de los mas veteranos, fueron los primeros en observar a lo lejos un grupo de gentes corriendo despavoridos, y tras ellos, semienterrado en los hielos el terrible gusano.

Apenas distinguieron a algun conocido componente de la guardia de Bodarr y vieron que, tanto Bodarr como Vigort eran arrastrados a duras penas por varios hombres, todos se dispusieron a preparar un muro de escudos cerrando el circulo alrrededor de los excasos hombres que quedaban de los partidarios de ambos antagonistas. Gylfi dijo que, el Wyrm queria las vidas de aquellos hombres, y que de nada serviria intentar defenderles, pero Odyndis y Ovard negaron con la cabeza, la muchacha elevo su voz para que todos la escuchasen.

  • Nada han hecho estos hombres para merecer mi odio, bien es verdad que solo persiguen sus propios intereses y sus corazones son tan oscuros que han despertado al Wyrm, Posiblemente, se matarian entre ellos por poseer lo que buscamos, posiblemente, nos traicionarian de poseerlo ya y no sean de fiar. Pero abandonarles a su suerte, no es una opción, eso demostraria, que somos tan alimañas como ellos. Por eso, yo misma me adelantare y apaciguare al Wyrm.

Y diciendo esto, suavemente aparto a varios de los guerreros que cerraban el muro de escudos esperando aterrados el ataque del gusano, que de momento habia desaparecido bajo los hielos, y se planto en pie, sola e indefensa fuera del muro...tan solo Ovard salio tras ella con su espada y escudo en mano, pero ella volvio a encararse a el para responder.

  • Envaina esa espada Ovard, no servira de nada si fracaso ante el Wyrm, si no me escucha, todos moriremos aquí, pues nada pueden nuestras armas contra la coraza de la bestia de los hielos. Ademas, no es odio ni ansia de sangre lo que precisamos para apaciguar al guardian...Ella nos lo dijo, que mirasemos en el corazon, y guardasemos las armas.

Ovard hubiera deseado replicar algo,pero habia algo en la mirada de ella, que nunca habia visto antes, asi, que, arrojo sus armas al suelo, y tan solo, se limitó a estar alli, frente a ella, incredulo de su propia confianza, esperando la llegada de la bestia.

Y el Wyrm no se hizo esperar, emergiendo de los hielos , enorme, temible, mientras todos lo observaban aterrados. Tan solo una muchacha, apenas una adolescente, avanzo hacia el gran gusano con los brazos abiertos, situandose tan cerca de la bestia que nadie hubiera podido prestarla ayuda si esta atacaba.

  • Ya basta!- Gimio con voz llorosa- Ya ha caido bastante sangre !!. Nada han hecho estos que persigues por ganarse mi afecto, pero igualmente, no tengo motivos para odiarles!. No puedo ver lo que esconden sus corazones, pero veo el miedo en sus rostros, y que han aprendido la leccion. No podemos abandonarles a su suerte, y no deseamos mas lucha ni mas sangre, pero estamos dispuestos a defender sus vidas, aunque nada hayan hecho para ganarse nuestro interés por sus vidas.

Y alli permanecio, quieta, con la bestia erguida , esperando el golpe final que acabase con su vida, y con la de todos sus compañeros detras. Pero el Wyrm se deslizo con suavidad, hasta posarse mansamente en el suelo. Y entonces vieron el resplandor justo enfrente de la bestia, y tras el, la aparición de la joven doncella de cabellos dorados, que se acerco a acariciar la enorme cabezota de la bestia como si se tratase de un perrito faldero.

  • Veo que has comprendido la esencia de la bestia...el odio solo engrendra mas odio, No se puede acceder a un don de los Dioses, para usarlo en mezquinos asuntos humanos. Dos hombres dispuestos a sacrificar muchas vidas, solo para saciar sus ambiciones, no merecen el favor de los elevados. Sin embargo, tu, que no has recibido mas que desprecio de los que envian a estas gentes, estas dispuesta a perdonar, y a arriesgar tu vida para defenderles. Te considero digna de acceder al don de Idunn pero solo tu y tu compañero podreis entrar en el valle sagrado.

La joven doncella se adelanto para susurrar algo al oido de la joven Ovardr que asintio complacida y despues, desaparecio en un resplandor tal y como habia venido. Y tras ella, se retiró reptando el enorme Wyrm , hasta que se perdio en la imensidad blanca ante el asombro de todos.

Con el amanecer del siuiente dia , la joven Odyndis, partio hacia el pie de la cercana montaña, acompañada de Ovard, mientras el resto de sus compañeros, acampaban en la explanada, y trataban de atender a los heridos por el Wyrm , tal como les habia pedido la muchacha. Tras unas largas horas de marcha, se encontraron al pie de una cueva, y Odyndis se adentro sin temor en ella, seguida por Ovard , tras seguir un largo pasadizo que atravesaba la montaña, emergieron a la superficie y tuvieron que frotarse los ojos para creer lo que estaban viendo, se encontraban en medio de una verde arboleda, donde cantaban los pajarillos y correteaban las ardillas, y frente a ellos, estaba la siempe joven Idunn, reinando en el Brunnaker. Ella sonrió y les señalo un templo de columnas cubiertas de hiedras , donde tendrian que elegir entre dos obsequios de los Dioses. Con una risa alegre, la Diosa desaparecio una vez mas, entre los arboles, y los dos jovenes, penetraron en el templo, subiendo la escalinata y accediendo a una sala donde descansaban en un pedestal dos pequeñas cajas. Una de ellas, es una eski de madera, con una humilde talla, la otra, es un cofrecillo de oro con incrustaciones de piedras preciosas. Y solo una de ellas contenia el don de los Dioses.

Finalmente Odyndis se decidio, y tomando la humilde cajita de madera en sus manos, no quiso siquiera acercarse al valioso cofrecillo de oro y su contenido. Y una vez con la pequeña eski en sus manos, salio sonriente del templo, seguida por Ovard , que no hizo ninguna pregunta, estaba seguro de que ella, habia elegido el regalo adecuado, y se limito a seguirla, mientras ambos cruzaban la arboleda, observados desde las sombras por la sonriente cara de Idunn.

Pero la avaricia siempre encuentra donde sembrar su semilla, y Krada, la oscura seirdkona de Loki, se escabullo de entre todos los que habian sobrevivido al encuentro con el Wyrm, y usando sus artes oscuras, permanecio oculta esperando su oportunidad para robar el secreto de los Dioses. Y ahora, que la joven pusilanime se habia marchado, podia poner sus manos sobre el cofre dorado. Sin duda, un objeto divino, la haria convertirse en la más poderosa de las seidrkonas y su fama y pestigio no tendrian limites. Asi que, se deslizo en el interior del templo como una serpiente, y tomo de su pedestal el cofre, y con el, huyo de la arboleda, sonriendo y muy satisfecha de que sus habilidades otorgadas por el culto a Loki, la hubiesen otorgado el dominio de las sombras, para permanecer oculta y seguir a la joven Odyndis hasta su preciado trofeo.

No obstante, hay criaturas a las que la magia no logra eludir, y cuando ya se creia a salvo y se disponia a acudir al encuentro de la espedicion con su trofeo bien oculto, para representar algun tipo de engaño digno de Loki, los hielos se resquebrajaron tras de ella, y vio emerger a la enorme bestia. Supo entonces, que habia hecho una mala eleccion, y que ahora, nadie podia ayudarla y habia llegado al fin de sus dias.

Mientras, Odyndis y todos los demas, regresaban a la playa donde les esperaba el Ravnhoude, mientras, por el camino, la joven les explicaba los pormenores de la ultima de las pruebas y el porque de su eleccion.

  • La Diosa Idunn prueba el temple de nuestros corazones, y la ausencia de avaricia y codicia, que nos hagan indignos de su don. Si esa es la llave que nos otorga su favor...¿ocultaria la Diosa su preciado tesoro en un ostentoso cofre que despierte nuestra avaricia?.

El camino a casa fue bastante mas placido de lo esperado, como si, los Dioses ya hubiesen probado a los tripulantes del navio, y su veredicto fuese aprobatorio, tan solo, Bodarr y Vigort permanecian en un estado febril, alcanzados por el veneno del Wyrm. Odyndis les miraba preocupada, y entonces, entendio la ultima de las revelaciones que la Diosa le habia confiado al oido tras el encuentro con el Wyrm. Tendria que hacer un sacrificio doloroso, en pos de evitar mas dolor. Y vio llegado el momento y no quiso demorarlo mas.

Abrio la pequeña eski, que acurrucaba contra su pecho, y de ella, saco una pequeña manzana de piel dorada, la miro con cierto pesar, y sin pensarselo dos veces, saco de su vaina una pequeña daga, y la dividio en dos mitades. Luego se acerco a los partidarios de uno y otro lider, y les entrego sendas partes, pidiendoles que se las diesen a comer a los dos heridos. Svein la miro incredulo y protesto airado increpando a la joven.

  • ¿¿Otorgas a estas vivoras el don que los Dioses nos han entregado para nuestro soberano??...acaso te has vuelto loca mujer??.

  • Nadie ama mas al gran Konungr Einar que el fruto de su sangre Svein. Y nadie llorara mas su muerte que su hija. Pero, Einar ha sido valiente guerrero y de firme mano en la batalla, asi como justo en la paz y administrador de la paz en el fiordo. ¿¿Acaso le negarian Odin y Tyr un puesto entre todos los elegidos??. Ha vivido una larga vida, y ha llegado a ser la inspiracion de escaldos que cantaran durante generaciones la grandeza de Einar el justo...-Intervino suave y pausadamente Ovard, antes de que la propia Odyndis terminase de explicar esta repentina decision...

  • Mi padre entregara su alma a Odin, lo mas probable es que lo haya hecho ya, nos hemos retrasado mucho en el viaje, y el plazo que la anciana seidrkona nos garantizo que se mantendria con vida, ha expirado ya hace varias noches. Lloraremos su falta, y todos le recordaran como un hombre justo, pero, el fiordo necesita un regente y no deseo que, llegados a casa, los familiares de estos dos hombres se nos hechen encima como bestias furibundas por haber podido salvar sus vidas, y haberlos dejado morir. No sera esta expedicion y su resultado, la que desate un baño de sangre entre las gentes del fiordo. Bodarr regresara a casa con vida, y regresaremos a Angot a su hijo con vida, de este modo, no tendrá motivos para comenzar una venganza sangrienta. Mi padre lo hubiera querido asi, ha vivido los ultimos 20 años para preservar la paz en el fiordo.

Pronto se corrio la voz de que Odyndis y los tripulantes del Ravnhoude regresaban a casa, y que traian con ellos a lo que restaba de la expedicion del Svartormr. Y hubo un gran pesar cuando se supo que regresaban con las manos vacias, porque todos convinieron que, nada contarian de la decisión de la muchacha, y confiaban en que, los dos hombres que haian salvado sus vidas gracias a la prodigiosa manzana , apenas la habian ingerido, empezaron a mejorar progresivamente, mantuviesen su promesa de narrar a los suyos lo que devían a Odyndis y su generosidad.

Odyndis fue a reunirse con la reina Ygwen, que estaba recluida triste y abatida en los aposentos reales, aferrando la mano de su esposo, al que ya solo le quedaba un ultimo aliento de vida. Odyndis narro a la reina su decision, pero esta la miro llorosa...

  • No te culpo por intentar mantener la paz...pero una vivora es siempre una vivora. En cuanto mi esposo muera, los dos hombres que has salvado, comenzaran a reunir partidarios, y finalmente, el fiordo conocera al nuevo Konungr, en el que venza tras la batalla.

Y ciertamente, asi fue...al dia siguiente se anuncio la muerte de Einar, y tal como la reina habia anunciado, ambos contendientes, olvidaron pronto su promesa y la gratitud debida a Odyndis y se postularon como futuros Konungr. Al menos, llegaron a un acuerdo entre ellos, ninguno deseaba mas derramamiento de sangre del pueblo, tras la lamentable experiencia de la que habian salido con vida, asi que, decidieron zanjar el asunto con un holmgang, un duelo, que decidiria quien seria el futuro Konungr.

Pero lo que ninguno de los dos sabia, es que, el rey Einar vivia aun...y que su prudente pequeña, habia recordado un ultimo consejo de Idunn, justo a tiempo, para evitar que una de sus codiciosas hermanastras se alzase como nueva reina en el fiordo. Con el ultimo aliento de Einar, y ya cuando solo le restaba despedirse de sus padre, recordo la nuez que la Diosa habia dejado en su mano y sus palabras “usala solo cuando todo parezca perdido”.

Asi, ambos contendientes se prepararon para batirse , con todas las gentes del fiordo presenciando el combate , pero no llegaron a ensangrentar sus armas, pues vieron atonitos al Konungr Einar que suponian muerto en pie, con su vigor restablecido y rodeado de toda su guardia personal, todos guerreros avezados, que junto al poderoso Einar, formaban un mortifero ejercito, contra el que no osaban medirse. El señor del fiordo habia regresado, y ninguno de los dos, tenia valor para disputarle el trono en duelo.

Dicen que Einar fue justo y piadoso pese a todo, permitió a Bodarr quedarse el tiempo justo para construir una nave y hacerse a la mar, para regresar a sus tierras con su gente. En cuanto a Vigort, fue devuelto a su padre, que mantuvo parte de su hacienda, pero permanecio bajo la mirada atenta de todos, siempre con la sombra de que su clan era cuna de vivoras traidoras, hasta el fin de sus dias. Su propia traicion, se convitio en la cadena que les mantenia sujetos bajo las miradas vigilanes de todos los clanes del fiordo.

De las dos doncellas consentidas, dicen que, con el tiempo, llegaron a arrepentirse de sus errores, y acabaron contrayendo matrimonios de provecho para la grandeza de su estirpe, aunque ninguno e los dos pretendientes de antaño fueran los elegidos.En cuanto a la prudente Odyndis y Ovard, con el tiempo, llegarian a ser una respetable pareja de Bondi y Husfreya y heredarian el gran sitial del Konungr del fiordo...

De este modo, la paz fue restaurada, y se dice que el rey Einar vivio aun largos años, antes de entrar en el salon de los elegidos, los suficientes para ver casar a todas sus hijas, y encumbrar el mismo a Ovard como señor del fiordo en asamblea, con el consentimiento de todos...

Finalmente, la vida en el fiordo, se volvio de nuevo, suave y apacible como la primavera...y dicen que el vientre de Odyndis engendro varios hijos...que como la nuez, duermen largo trecho, hasta que llega su tiempo, y despiertan, como semillas de una nueva primavera... Pero esa amigos mios, es otra historia, que dejaremos para mejor ocasión.