En
algun lugar magico, perdido entre árboles y brumas, lejos del ojo
curioso de los humanos, dicen que existe un mundo donde habitan todas
las criaturas magicas.
Dicen
tambien que este magico rincon, existe desde muy antiguo y asi, se
dice que la magia existe en el desde una epoca muy remota, mucho
antes de que los humanos empezasen a contar el tiempo y dejasen su
huella sobre la tierra .
Los
mas ancianos hablan de un tiempo perdido, cuando el mundo era aún un
inmenso jardín salvaje y la tierra era aun muy joven,, por ese
entonces, vivían en los montes y bosques unos seres magicos,
inquietos y diminutos, se dice que eran pequeños como un pulgar, y
de apariencia hermosa, de piel suave y rosada y rostro delicado como
una muñeca de porcelana.
Tenían
, dependiendo de su naturaleza, caracteristicas diferentes, algunos,
acostumbrados a volar entre las flores, tenian en su espalda unas
alas muy delicadas y transparentes como las de las libelulas, tan
finas que parecian hechas de pura seda. Con ellas se desplazaban
rapido, volando de aquí a alla, jugueteando entre las ramas de los
arbustos y jugando entre las flores silvestres, mientras
transportaban como abejitas a sus refugios los frutos y la miel que
les servian de alimentos.
Otras
criaturas vivian en los huecos de los arboles, o en cuevas bajo
tierra, eran de piernas cortas, pero sorprendentemente veloces, y
mucho mas fuertes de lo que sus pequeñas estaturas podrian
indicarnos. Otros vivian en los estanques y los rios, y nadaban como
pececillos en el agua, rivalizando con las criaturas de los rios....
Asi, no existia un lugar en la creacion, que no escondiese su
criatura magica...
Durante
la estación calurosa del año , cuando las montañas , los valles y
los bosques en que vivían se cubrían en la estacion de bonanza de
una alfombra de flores silvestres y las plantas estaban cuajadas de
frutos silvestres y los días eran largos y luminosos e intensos
,estos seres diminutos eran especialmente felices, pues la naturaleza
les proveia de tdo cuanto pudiesen desear. Era esta estacion de la
luz, la época de la alegría y la abundancia, en la que, entre todas
las razas magicas, nacían la mayoría de los bebés y también era
esta la estacion de los juegos despreocupados y los baños en el
riachuelo cercano,, jugueteando con sus primos acuaticos, y las
parejas se encontraban en los prados, con gran alboroto de los mas
jóvenes que allí se emparejaban... y asi vivian felices las
pequeñas criaturas magicas.
Por
eso, cuando la estacion calida iba decayendo y poco a poco llegaban
las primeras lluvias y el frio y los días se iban acortando,
nuestros diminutos amigos comenzaban a sentir, que el tiempo del
alboroto se acababa y empezaban a mostrarse un poco tristes y
alicaídos.
En
la estación fría del año , la vida cambiaba drasticamente para
ellos. Como dejaban de percibir el calor del sol en su piel rosada y
la luz del dia se escapaba tan pronto entre las ramas desnudas de
los arboles, sabían que era el momento de abandonar sus diversiones
despreoocupadas y sus juegos y de retirarse a sus refugios para
intentar aislarse de las tormentas, y poder soportar las bajas
temperaturas y la nieve.
Era
una estación de invierno pues, muy larga y solitaria, y entendereis
que muy dura para unos seres tan pequeños para quienes lo más
placentero era pasar el día al aire libre recibiendo la caricia de
los rayos del sol y jugando entre las flores, que en invierno
desaparecian casi por completo.
Ya
era sobradamente molesto, tener que pasarse las ultimas semanas de
bonanza en el tiempo, acumulando sin descanso provisiones para
soportar el frio invierno que poco a poco se haria dueño de todo.
Una
de las pequeñas haditas que peor llevaba estar encerrada en el Brugh
(asi se llaman los refugios de hadas) todo el invierno, era la joven
Gugu. Tal vez, este carácter inquieto le viniese dado por su
juventud, a decir verdad, Gugu solo contaba con unos cuantos cientos
de años, lo que en la cuenta de la edad de un hada, es ser apenas
una niña .
Ya
sea porque era aun muy jovencita, o porque su forma de ser era más
nerviosa que el de todas las demas haditas, lo cierto es que Gugu no
podía parar quieta en el refugio, se sentia mortalmente aburrida.
Todos los días, a pesar del frío reinante fuera, y de que la nieve
lo cubria todo, la joven hada salía envuelta en hojas secas y pelo
de las mudas de los animalitos del bosque al exterior, y daba un
corto paseo , intentando adueñarse del tibio resplandor del sol de
la tarde, mientras en su cabecita, hablaba con la naturaleza madre,
con un hilito de voz, le suplicaba al astro rey que en esa ocasión
se quedara tan solo un poquito más para que la noche no fuera tan
larga y fria y al parecer, el sol la escuchaba.
Y
así sucedia lo mismo dia a dia, jornada tras jornada, la joven se
asomaba inquieta al bosquecillo con la esperanza de que la luz del
dia, la mimase un par de minutos mas que ayer, antes de desaparecer
por el horizonte y regresar al Brugh.
Hasta
que en uno de estos paseos, sucedió algo que lo cambio todo, una
tarde, se dio cuenta de que sus anhelos empezaban a hacerse realidad
y que, hechando cuentas, cada dia regresaba un poco mas tarde a casa.
¡El sol había empezado a retrasar su partida para estar mas tiempo
a su lado!
La
noche ya no sería tan larga y fria a partir de entonces , penso . En
ese combate eterno que la pequeña Gugu habia oido contar docenas de
veces a los mas ancianos de las hadas, en el largo duelo entre las
tinieblas y la luz, parecia que la dama de la Primavera tímidamente
comenzaba a ganar la partida al invierno.Y de esta forma , Gugu se
puso muy contenta.
Empezó
a comportarse de modo mucho mas animado, de repente, le daba por
ponerse a cantar y a bailar, olvidándose casi del frío y de la
nieve, mientras corría animando a todos de guarida en guarida dando
la buena noticia a todos los que como ella deseaban la llegada de la
luz y la estacion calida.
Entonces,
los mas ancianos la contestaron que eso, no era nada nuevo, que todos
los años, llegaba la primavera, tras el frio invierno, pero ella
insistia en que, habia mucho por hacer, que habia que prepararlo todo
para la llegada de la primavera.
Convencidos
por el entusiasmo de la pequeña Gugo estos seres diminutos empezaron
a animarse tambien, y reuniendo todo lo que les quedeaba para pasar
el invierno, decidieron reunirse todos e hicieron una gran fiesta. El
festejo no podria tener mejor motivo ni razon de ser, la luz estaba
venciendo!.
Las
tinieblas estaban siendo vencidas y poco a poco, pero sin pausas, se
retiraban y daban paso al sol que, cada dia se quedaba un poco mas en
el cielo antes de dar paso al manto de las estrellas. Para animarle a
quedarse aun mas tiempo con ellos, los seres magicos del bosque
encendieron fuegos para que el sol viese que le saludaban desde lo
alto, por todas partes empezaron a buscar las primeras flores y
bortes de los arbustos y los primeros frutos y con ellos adornaron
con guirnaldas de acebo y brotes verdes sus moradas. ¡Que la luz
llamara a la luz! Gritaban mientras danzaban alegres alrrededor del
fuego.
Sacaron
de la comunidad lo mejor de sus provisiones y las reunieron para
compartir entre todos un rico festín donde nadie era extraño , asi
se mezclaron todas las razas de seres magicos y en feliz harmonia,
pasaron la noche juntos entre canciones, bromas y bailes. No
importaba ya para nada el frío, al calor de las fogatas, la nieve
era hermosa esa madrugada.
Los
pequeños seres alados estaban tan felices como cuando las flores
crecen por el prado y los frutos cuelgan de las ramas en la
primavera. Lo estaban tanto de ver llegar a la reunion a sus
hermanos de las montañas y el bosque , que, para demostrarse su
cariño y la amistad que los unía, a todos, empezaron a hacerse
pequeños presentes, regalos muy sencillos que se entregaban unos a
otros ilusionados, asi, a orillas del lago, que empezaba a
deshelarse, todas las razas magicas se intercambiaban sus regalitos.
Y
se hizo costrumbre entre todos, que los primeros destinatarios, como
suele suceder desde ese entonces, fueran los niños, auténticos
protagonistas de los festejos con sus juegos y sus risas, que hacían
que los adultos por unas horas tuvieran su mismo espíritu infantil.
Incluso las criaturas de las aguas, empezaban a mostrarse un poco,
pese a que a ellas, les resultaba especialmente dificil combatir el
hielo... pero por mera diversion, sus amigos de las especies del
bosque, empezaron a hacer figuras de nieve y a tallar el hielo y
darle formas de maravillosos animales y plantas... y todo ello a la
luz del fuego, resultaba muy hermoso.
Así
, desde que Gugu iniciase la costumbre entre las haditas, cada año,
cuando en la rueda de las estaciones, se cumple una vuelta completa,
y el sol inicia su regreso para su anual victoria en el solsticio, a
imitacion de todas las criaturas magicas, los seres humanos también
celebramos de algún modo nuestra alegría vistiendo de colores
alegres, adornando nuestras moradas con luces de colores que
iluminen la noche oscura y, a la manera de la pequeña Gugu, nos
reunimos con todos nuestros seres queridos y festejamos en medio del
invierno el nacimiento de una nueva luz que nos recuerda que tras las
tinieblas siempre renace la primavera, y que por duro que se presente
el invierno, al final, siempre acaba regresando la luz... y con ella
renace la alegria de vivir, mas pura y sincera.
Se
acerca Yule... unas fechas magicas donde las gentes comparten los
bienes de la tierra y todo extranjero es bien recibido en los
hogares, en estas fechas, la hospitalidad es una bendicion y ricos y
pobres comparten su hogar y su cena con todo aquel que viaja por los
frios caminos del norte.
Al
menos, asi era antes, y como casi todas las historias que suelo
contar, esta sucedió hace mucho, mucho tiempo en las tierras del
helado norte, donde vivia un hombre conocido como Sven el Miserable.
Ya
se que no es un nombre bonito, pero creedme, pequeños, la gente del
norte no suele adjudicar apodos desagradables a nadie, a no ser que
este alguien se lo haya ganado a pulso, y podeis estar seguros de que
Sven se merecia sin ninguna duda tal apodo.
Era
un hombre pendenciero, jugador empedernido, y bebedor . No es que
jugase mal, es que , en cuanto las cosas empezaban a irle
medianamente bien , se volvia un engreido, y empezaba a beber como un
poseso durante el juego, de este modo, en poco tiempo perdia la
concentracion por efecto del alcohol y siempre acababa perdiendo
grandes sumas de dinero.
Asi,
tenemos a Sven vagando por los caminos en una tarde fria, sus pies se
hunden en la nieve fresca, esta cansado, no tiene una misera moneda
en los bolsillos y esta hambriento, asi que , como puede avanza por
el estrecho camino a lo largo del bosque, rumbo a la aldea mas
cercana, donde quiza, dadas las fechas que se aproximan, pueda
encontrar un cobijo para pasar la noche.
Fue
entonces cuando lo vio, una figura acurrucada al lado de un arbol en
el borde del camino... al principio penso que era un caminante que ,
como el, hacia camino hacia la aldea, pero no tardo en darse cuenta
que aquel desdichado hacia muchos dias que habia dejado de caminar.
Podria tratarse de un hombre enfermo, o quiza de algun caminante que
fatigado por el camino, se sento a descansar apoyado en el arbol, y
tuvo la desgracia de quedarse dormido... luego el intenso frio hizo
el resto.
Penso
que aquel pobre hombre ya no necesitaba su capote, asi que antes de
enterrarle como pudo en la nieve fria, le registro de arriba a abajo,
pero aparte del capote, nada encontro que mereciese la pena.
Cuando
iba a continuar su camino, con muy oscuros pensamientos sobre la
clase de suerte que le esperaba si la cercana tormenta de nieve que
se adivinaba en los cielos le sorprendia en el bosque antes de llegar
a un lugar seguro, vio no lejos de alli un zurron de cuero oscuro, y
se acerco a rebuscar en su contenido.
Hubiese
agradecido que contuviese cualquier clase de alimento, que le
permitiese tomar un bocado para reponer fuerzas, pero lo unico que
encontro dentro fue una vieja bolsa de tela, y lo que encontro dentro
de ella le dejo con la boca abierta.
Plata...
una considerable cantidad de plata picada, que hacia que aquel
brillante metal en sus manos le hicese esbozar una sonrisa... penso
que sin duda aquellas riquezas pertenecian al desdichado que acababa
de enterrar en la nieve, y siendo Sven tal y como era, no quiso ni
preguntarse de donde habia salido tal fortuna en un hombre de
apariencia tan miserable como la suya, si cabe, todabia mas.
Ahora
aquella plata era toda suya!.... se metio unas cuantas pequeñas
piezas de plata picada en su propia bolsa vacia.... y el resto lo
dejo estar en en zurron que cargo consigo, y asi, a marchas forzadas
por miedo a la tormenta, siguio avanzando por el sendero del bosque,
hasta que agradecio a los dioses el divisar una luz a lo lejos.
Sin
duda, eran las luces del atardecer en una aldea cercana, o quiza una
granja solitaria... en todo caso, era un refugio para la noche, asi,
que Sven el Miserable penso que ese era sin duda su dia, y que la
suerte la tenia de cara.
Antes
de acercarse a lo que se adivinaba como una pequeña y solitaria
granja, penso en que, no tenia necesidad de presentarse alli con su
zurron cargado de plata... no sabia que clase de gente le esperaba
alli, asi que, como se suele decir “cree el ladron que todos son de
su condicion”, Sven se volvio desconfiado, se aproximo a una piedra
grande, una larga losa de piedra que marcaba los lindes del camino, y
señalaba la proximidad de una aldea.
Sven
no sabia leer las runas grabadas en la piedra, en realidad, en esos
tiempos pocos sabrian leerlas, pero aquella roca grabada al lado del
camino, le indicaba que cerca habia sin duda un señor poderoso que
la habia mandado levantar. Sven sabia que ningun campesino se
atreveria a cavar al lado de aquella roca por respeto al gran señor
que la habia mandado levantar, pero el era astuto, asi que hizo un
agujero en la nieve al pie de la gran roca, y alli escondio el zurron
con la plata... asi, en cuanto pasase la tormenta, podria regresar a
por ella... y empezar una nueva vida de señor... A partir de ahora,
ya nadie se atreveria a llamarle nunca mas Miserable.
Una
vez acabo de enterrar su tesoro, y con las manos medio heladas, por
el frio de la nieve en la que habia estado cavando, continuo camino
hasta la granja, y medio desfallecido, llego ante la puerta de lo que
parecia ser una granja de gente extremadamente pobre.
En
la puerta aparecio una niña pequeña, que le permitio entrar antes
de que Sven casi cayese al suelo, desfallecido por el hambre y el
frio...
Cuando
recupero el conocimiento, se encontro sentado en una silla muy
rustica, cerca de una pobre fogata, y ante el, estaban un hombre y
una mujer y la niña que le habia abierto la puerta.
Eran
gente muy pobre, apenas tenian mas que la ropa que vestian y unas muy
excasas posesiones que eran el poco mobiliario de la casa. Con todo,
y excusandose por lo pobre que iba a ser el alimento que le podrian
ofrecer, el ama de la casa, le entrego un plato de sopa, si es que,
aquella comida tan pobre podia llamarse asi...
Era
apenas un pobre caldo caliente donde flotaban unas cuantas legumbres
excasas y eso era todo...acompañado de un pedazo de pan de avena,
tan duro y seco, que tendria que remojarlo varias veces en la sopa
caliente para poder tragarlo.
Sven
miro a su alrrededor, la mujer agacho la cabeza avergonzada, mientras
el campesino sin decir nada, abrazaba a su hija negando con la
cabeza, como diciendo “nada mas podemos ofrecer forastero”.
Sven
tomo una cucharada de aquella sopa caliente...y torcio la cara con
desagrado, escupiendo de mala gana lo que acababa de tragar... En
otro momento, sin duda se la hubiese tragado toda, hasta la ultima
gota, incluso hubiese rebañado el plato con el pan humedo... pero
como dicen los antiguos dichos “la avacia es hermana de la
sobervia”.
Sven
penso, “ahora soy un hombre rico...¿porque tengo que conformarme
con esta bazofia incomible?... tengo en el bolsillo plata para
pagarme un buen alimento...pero estos muertos de hambre no tienen
nada que merezca la pena …. nada de comida que merezca pagar por
ella”.
Asi
que, se levanto altivo y recogio el manto y se lo puso...pese a que
el campesino le rogo que se quedase...que se avecinaba la tormenta.
Sven
tuvo muy malas palabras para la pareja de campesinos, incluso hizo
llorar a la pequeña, y tras dar un portazo, salio fuera de la cabaña
y se hecho al camino gruñendo y maldiciendo por lo bajo... “ hoy
es mi ultimo dia de miserias!”.
Los
campesinos le vieron alejarse, y nada que pudieran hacer por
detenerle, valio de mucho, aquel forastero tan mal encarado,
desaparecio en el camino, y con el, tras sus huellas, aparecio la
tormenta.
Pero
Sven no la vio llegar, caminaba contento y a grandes zancadas por el
camino, rumbo a la que el creia que seria , la cercana aldea... pero
a veces, los calculos no son tan seguros como uno cree, y los
inviernos del norte, cuando Skadi, la señora del invierno reclama su
reino en los bosques, no son nunca una fiesta...
Asi,
la excasa media hora de camino de paseo que seria hasta agradable un
dia cualquiera que separaba la aldea de la granja de los campesinos
pobres que acababa de abandonar, se comvirtio en un infierno de frio
y nieve, y aunque veia las luces de la aldea a cierta distancia, lo
cierto es que, la tormenta le sorprendio de lleno... y poco a poco
comenzaron a fallarle las fuerzas.
Primero
fueron unos cuantos copos de nieve , que Sven recibio refunfuñando,
tapandose con el capote la cabeza, poco despues, un frio gelido y
continuado, y una ventisca de nieve que apenas le dejaba ver delante
de si, mas de unos metros en la senda.
Despues
el camino se hizo eterno, la nieve era cada vez mas espesa y blanda,
y cada paso suponia enterrarse hasta las rodillas, o caer y tener que
incorporarse maldiciendo,en medio de aquel mar de nieve blanca , y lo
peor de aquel castigo de Skadi a la sobervia de Sven, es que veia
realmente cerca, las luces de la aldea.
Sin
embargo, acabo rendido , desplomandose sin fuerzas en el camino,
incapaz de volver a levantarse, mientras la nieve empezaba a cubrirle
por encima de sus ropas, y intentando extender la mano hacia la luz
lejana, como si aun pudiese alcanzar de alguna forma la aldea.
Entonces
se dio cuenta Sven de su error...ahora daria toda la plata del mundo
por una cucharada de aquella sopa caliente, y le pareceria estar en
un palacio al calor de la pequeña hoguera en la vieja cabaña de los
campesinos, incluso sonreiria feliz a la pequeña que le tendia el
pan duro como una piedra, que le pareceria el mejor de los
manjares... por el que daria ahora toda la plata que poseia...si
pudiera!.
Cuando
desperto, se encontro tendido en un camastro, rodeado de gentes que
le miraban con caras preocupadas... sin duda, de alguna forma, habia
llegado a la aldea, aunque no podia recordar el como ni de que
manera.
Y
los dioses hicieron sin duda que me retrasase en mi camino
repartiendo toneles!- Dijo una voz de hombre mas grave mientras se
acercaba a observar como Sven lentamente abria los ojos y observaba
todo a su derredor... como si aun le costase creer que de alguna
forma, se habia producido un milagro y habia escapado a una muerte
cierta.
Comio
y bebio de todo lo que le ofrecieron todos los que le rodeaban, y
tras oir como un tonelero le habia cargado en su carreta tras
encontrarle a poca distancia de la aldea , agradecido y como uno mas,
se unio al jolgorio de las celebraciones del Yule, como uno mas en la
fiesta.
Incluso,
cuando se le paso el susto, acepto de buena gana un cuerno de
hidromiel, y bebio y empezo a escuchar las historias de las buenas
gentes, que mientras cenaban , hacian planes para continuar con sus
vidas, tras la tormenta de nieve de aquella noche, y tras los dias de
fiesta.
Sven
escucho de la necesidad de reparar el puente que cruza el rio hacia
el sur, y de que habia que techar de nuevo y reparar las vigas del
viejo salon comunal, incluso de la necesidad de reparar tambien el
molino de agua que usaban todos en comun para la molienda del
grano... pero aunque todos brindaban y decian “los dioses nos
ayudaran”, la verdad es que entre tanta sonrisa, Sven adivinaba a
unas gentes muy sencillas y trabajadoras, con unos problemas muy
dificiles de arreglar que hacian de sobrevivir a aquel duro invierno,
una apuesta muy seria.
Quiza
agradecido por haber salvado la vida, Sven empezo a prometer que el
se haria cargo de costear las reparaciones, y como si se tratase de
un elfo o un hada, iba por la sala prometiendo cumplir deseos a
todos, aunque nadie se lo tomase muy en serio, sin duda, habia bebido
demasiada cerveza.
Y
asi, tan de repente como aparecio, tras una dura noche, desaparecio
la tormenta, y Sven salio con los campesinos a reparar los estragos
de la nieve por toda la aldea. Trabajo agradecido a todos, como uno
mas, y no falto quien medio en broma, le recordase todas las promesas
que habia hecho como si se tratase de un emviado de los dioses, a
todos aunque nadie esperaba que fuesen cosa seria.
Pero
Sven sonreia para sus adentros, y dejo pasar unos dias, trabajando
duro en reparar en la aldea, los estragos de la tormenta... al cabo
de esos dias, la nieve empezo a menguar en espesor...y una buena
mañana Sven desaparecio de la aldea... Todos pensaron que habia
seguido su camino, pero la verdad es que Sven tenia otras ideas.
Con
la plata que portaba encima, compro a un granjero un caballo, y con
el, se dirigio a la gran roca tallada de runas, para desenterrar su
tesoro, y con el , en su zurron, cabalgo hacia la gran ciudad donde
se habia arruinado jugando... alli sabia donde gastarse la plata …
pero esta vez no seria jugando... esta vez, no se dejaria guiar ni
por la avaricia ni por la pereza.
En
la gran noche del fin de Yule, se presento en la cabaña de los
campesinos, tras de si, venian en larga hilera, una columna de
carretas... llenas de materiales y de alimentos... de esta forma,
Sven se disculpaba con los campesinos por su comportamiento tan ruin
y por despreciar la hospitalidad que tan generosamente se le habia
ofrecido la noche de la tormenta.
Se
dice que, habiendo comida y materiales para el trabajo, no faltaron
manos dispuestas para las tareas, y asi , uno a uno, fueron
haciendose todos los trabajos necesarios para mejorar la vida a todos
los habitantes de la aldea.
De
Sven dicen que se quedo tan pobre como antes de empezar esta
historia, pero ahora habia encontrado una riqueza mucho mayor que la
plata o el oro...Ahora le llamaban El Generoso Sven, y tenia abiertas
en todas las casas de la aldea todas las puertas, nunca le volvieron
a faltar ni el afecto de una sonrisa amiga, ni un plato de sopa
fresca...
Y
es que como dicen en el norte “Una sonrisa amable vale plata... y
una mano tendida abre todas las puertas”.
Hace
tiempo, realmente mucho tiempo, en una pequeña aldea perdida en las
montañas del norte, sus habitantes se apresuraban a terminar de
recojer las cosechas, almacenar a toda prisa troncos y leña y
prepararse para la estacion fria,pues como todos los años, la
temperatura descendia rapido y el invierno se acercaba y con el, el
frió y las nevadas interminables.
Era
esta estacion fria una época triste, oscura y muy aburrida, la luz
del dia duraba muy pocas horas,y muchos dias el sol apenas salia
timidamente por entre los nubarrones grises, pero enseguida volvía a
esconderse apenas a media tarde.
Era
pues el invierno un tiempo en el que no se salia apenas de las
casas, y por consiguiente una estacion muy penosa y aburrida para
todos los niños que no podían salir a jugar, ya que fuera hacia
demasiado frió.
En
la aldea habian empezado a buscar formas de hacer mas llevaderos los
rigores del invierno,asi que, todos los vecinos tenían una
tradición, cada año y antes de que llegaran las nevadas mas
espesas, se reunían todos los vecinos comvocados para encontrarse en
alguna casa grande, y es de notar que ,quizá por que sabian que a
buen seguro pasarían muchos días antes de que pudieran volverse a
encontar de nuevo casi nadie solia faltar a la cita.
Se
reunían todos los miembros de la comunidad, leñadores,
agricultores; pastores, y hasta los duendes y las hadas también
estaban invitados y se unían a la celebración, antes de encerrarse
en sus casitas ocultas en los rincones mas insospechados del bosque
hasta que llegara la primavera y pudiesen verse todos con mas
frecuencia.
Uno
de los vecinos de la aldea era un hombre de carácter afable y
bonachon, un robusto y habil leñador,y como todos en la aldea, sabia
que después de esta gran celebración en la que todos pasaban una
agradable velada juntos, vendrían interminables días oscuros y
aburridos y mas que para nadie, esos dias serian especialmente duros
para los niños que no podrían moverse de las casas ni reunirse con
sus amigos para salir a jugar.
Era
un hombre muy habilidoso y le encantaba hacer regalos a los niños y
con los trozos pequeños de los arboles que cortaba, hacia pequeñas
tallas de animales tallando con su navaja, y las iba atesorando, para
regalarlas a los niños en la gran reunion y que no se sintieran tan
tristes.
Con
el tiempo, todos los niños de la comarca esperaban ansiosos esa
celebración, para que el buen leñador les entregara su juguete y el
buen hombre hacia todo lo que podia por complacerles.
Cada
año que pasaba había mas niños que se ponian a la cola, y
aumentaban las familias con retoños a quien hacer regalos y el
pobre Claus (pues asi dicen que se llamaba el leñador) no podía con
todo el trabajo que eso suponía, aunque se pasaba muchas horas
tallando con su navaja ,y aunque contaba con la ayuda de su esposa
que confeccionaba muñequitas de trapo para las niñas ,la verdad es
que siempre sucedia que por mas que se esforzaba, no era suficientey
siempre tenia que desilusionar a algun peque que se quedaba sin
regalo.
Un
día se paso a verle Alph, un duende bromista y con fama de ser algo
inquieto y metomeentodo, y como siempre se colo en su casa sin ser
siquiera formalmente invitado a entrar y le encontró muy atareado
tallando sin descanso y aunque parecia feliz con lo que hacia, el
duende le noto a su vez apenado por que no podía hacer regalos para
todos los niños que solicitaban uno.
Fue
entonces cuando tras despedirse del buen leñador, el duende se
dedico a reunirse muy en secreto con todos sus hermanos y familiares
(y de todos es sabido que los duendes son siempre familias muy
numerosas), de este modo, el buen duende hablo con todos los duendes
de la comarca, y asi consiguio que todos se comprometiesen en alianza
con el fin de ayudar a Claus.
Así
fue como Claus y todos los duendes que vivían en la aldea y los
alrededores se unieron en el cobertizo del leñador y se pusieron
manos a la obra para tallar la madera, pintarla y envolver las lindas
figuritas talladas. Y con tanta y tan buena mano de obra, pronto la
oferta de regalos no se limito solo a figuritas de animales tallados,
pronto hubo muchas muñecas y muebles diminutos de juguete, incluso
los duendes del norte tallaban zuecos del pie derecho, mientras los
del sur, hacian los del izquierdo...mientras que las duendecillas
hacian lo mismo con las medias...
Pero
claro pese a que el numero de regalos aumento mucho, los regalos solo
llegaban a los niños de la aldea de Claus y de las comarcas mas
cercanas, y pronto se dieron cuenta de que los niños que vivían en
las montañas y en otras aldeas mas lejanas no recibían los regalos
aunque a veces sobrasen algunos en el reparto, ya que no había
tiempo de repartirlos a todos antes de la caida de las grandes
nevadas.
Ahí
fue cuando Silk , la lider de las revoltosas haditas del bosque
decidio intervenir y tras reunirse con sus hermanitas, tubieron
juntas la feliz idea de hablar con el jefe de la manada de renos y
pedirle su ayuda para que llevaran los regalos de Claus a las casas
mas alejadas.
Y
así fue según cuentan a los mas peques las abuelas del norte ,que
el buen Claus cada vez con mas regalos, hacia una veloz ronda en los
albores de la estacion invernal y repartía sus presentes en todas
las casas en las que hubiera niños.
Cada
vez el buen Claus iba mas y mas lejos con su veloz trineo y sus
renos y por medio de los mensajes de los buhos y cuervos que
encontraba en el camino, sabia de muchos mas niños que estaban
siempre un poco mas lejos del ultimo punto al que habia llegado el
año anterior.
Siempre
habia un lugar mas alejado donde un niño esperaba su regalo, nunca
habia un lugar lo demasiado lejos para ir a repartir.
No
le daba tiempo por mas prisa que se daba, y siempre por mas que se
esforzaban el y todos los que colaboraban con el, se quedaba algun
peque sin su regalo, ya que, no podía llegar aun y con la ayuda de
los renos.
Una
noche, Claus salio de su casa cabizbajo, y se dedico a pasear, triste
y pensativo, ya que no hallaba la manera de poder llegar a todos los
niños y entregarles su regalo.
De
pronto oyó que alguien le llamaba desde algun lugar que no lograba
identificar.... "Claus, Claus.....el se giro mirando a su
derredor ,pero no vio a nadie "Claus, Claus, mira hacia arriba,
soy yo y estoy aquí, yo te estoy llamando!!.
Claus
miro hacia la luna que estaba muy redonda y llena y le parecio que
esa noche tenia un brillo magico y muy especial y creyo ver lo que
era una hermosa mujer resplandeciendo en medio de la luna, ella le
dijo: "Claus, aun que no has sido bendecido con tener tus
propios hijos, tu has querido como si fuesen tuyos a todos los niños
que has encontrado en tu camino. Se que te sientes aflijido y triste
por no poder hacer felices a todos. Has dado todo lo que has podido y
por tu entrega y por tres recibirás todo el bien que has dado!.
Claus
miro embobado e incrédulo a la dama que le hablaba desde la luna,y
frotandose los ojos para acabar de creer lo que estaba sucediendo y
alzo sus manos hacia la luna y dijo: "Señora,yo solo quiero
seguir con la labor que he comenzado, y sobre todo darles un poco de
felicidad y una sonrisa a todos los niños por lejos que estén.
A
eso la señora le respondió: "Voy a concederte tu deseo, te
concedere un cascabel magico que colgaras en tu trineo, con su sonido
el tiempo pasara mas despacio hasta que todos los niños tengan sus
presentes, y tu no notaras el cansancio, ademas, yo siempre estaré
a tu lado y viajaras tan veloz como el viento.
Y
así fue a partir de entonces, Claus con la ayuda de los duendes, que
ayudaban en la fabricacion de juguetes, tallando las figuras y
pintándolas, las hadas que también ponían su granito de arena,y la
velocidad de los renos que siempre estaban dispuestos, pudo llegar
todos los inviernos a todas las casas y dar un poco de alegría y
felicidad.
Algunos
dicen que no solo el tiempo pasa despacio para la gran noche de los
sueños, la noche de Yule, las mas ancianas creen que tambien pasa
despacio para Claus...y todos sus colaboradores, ya que realizan la
misma hermosa tarea desde hace muchos, pero muchos años...
Otros,
los mas cascarrabias, dicen que esto no es mas que un cuento de
viejas... pero ya me conoceis..me encantan los cuentos, y ver reir a
los peques... ademas estamos en Yule... y si no creeis en el magico
Claus y sus duendes en estas fechas... ¿cuando sino vais a creer en
algo mas hermoso?.
Cuentan
que hace mucho, mucho tiempo, habito en Irlanda una familia de
granjeros que se pasaron la vida, esperando que los dioses les
concediesen un hijo, y asi, por mas que lo intentaron, pasaron los
años y el ansiado hijo no llegaba.
La
ya muy madura esposa, acudio en peregrinacion al centro de Irlanda,
donde decian que se reunian los Druidas para honrar a los dioses, y
alli se quedo, arrodillada durante dias a los pies de las estatuas de
madera de los dioses, suplicando por el tan ansiado hijo que les
confortase en su vejez.
A
veces, los dioses son caprichosos, pero esta vez, quiza porque la
pobre mujer se paso dias y noches enteras al raso, orando a los
dioses sin importarle el frio de la noche o la lluvia intensa, los
dioses se apiadaron de ella y al regresar a casa , tras un largo y
extenuante camino de vuelta, la semilla de una nueva vida habia sido
concedida por los dioses... y asi, el ya casi anciano matrimonio,
vivieron con regocijo la preñez de ella, y cumplido el tiempo de
feliz espera, nacio por fin el hijo que tanto deseaban.
Asi,
pusieron a su hijo el hermoso nombre de Shean (misericordia de los
dioses), y ya felices por tener al fin un hijo que heredase sus pocas
posesiones, continuaron sus dias, hasta que la vejez empezo a
blanquear sus cabellos y curvar sus huesos.
Shean
crecio para cuidar de sus ya muy ancianos padres, y pese a que, como
corresponde a todo hijo, era respetuoso y cuidadoso con sus padres y
les procuraba una buena vejez, lo cierto es que sus ancianos padres
no tardaron en darse cuenta de que, pese a que su hijo procuraba que
nada les faltase en su vejez, no servia en absoluto para hacerse
cargo de la granja.
Al
joven muchacho no le agradaban en absoluto las duras tareas del
campo, y si araba de muy mala gana la tierra o cuidaba del escaso
ganado que poseian, era unicamente por asegurar el alimento necesario
para sus padres, ya que el cuidado de los ancianos es un deber
sagrado entre los antiguos pobladores de Irlanda. Pero fuera de esto,
Shean se pasaba el dia holgazaneando, y manteniendo a duras penas la
granja en sus minimas funciones.
Sus
padres estaban tristes, nada decian, pues su hijo cumplia con su
deber de cuidarles en su vejez, pero dada su dejadez, la granja
estaba cada dia menos cuidada, y se iba deteriorando poco a poco, de
la poca tierra que poseian, el muchacho solo sembraba menos de la
mitad, asi que la tierra se estaba llenando de malas hierbas y
hechandose a perder, lo mismo sucedia con el resto de la granja, que
lucia abandonada y maltrecha.
Asi
que, viendo los ancianos que, nada se podia hacer para inculcar a su
hijo el amor por la granja y sus tareas, trataron de buscarle otro
oficio, uno que le garantizase un futuro en el dia en que ellos
faltasen.
De
esta forma, se encontraron con el Bardo Fay (el cuervo) , y le
hablaron de su hijo, el bardo se comprometio a intentar formarlo en
su dificil oficio, y de esta forma, los ancianos se retiraron
agradecidos.
Aquella
misma noche, los ancianos hablaron en la cena con su hijo, y le
comunicaron que en cuanto ellos ya no estuviesen, el bardo Fay se
encargaria de formarle como bardo. Al joven Shean le parecio una
propuesta fabulosa, los bardos tenian un trabajo aparentemente
sencillo, iban de aldea en aldea, recitando poemas y contando
historias, a veces, servian de enlace entre los campesinos y los
dioses, y a cambio de esto, recibian el mejor de los tratos, pues
cuando un bardo visitaba una aldea, todos se afanaban en agasajarle
con el mejor trato, el mas exquisito alojamiento y la mejor comida y
bebida.
El
invierno y los frios se llevaron a la isla de la eterna juventud y a
compañía de los dioses a los dos ancianos, pese a los cuidados de
Shean, que, libre ya de la obligacion sagrada de cuidar de sus
padres, no tardo en malvender tierras y granja, asi como en
deshacerse de las pocas cabezas de ganado que poseian sus padres por
un puñado de monedas.
Despreocupado
y holgazan, no tardo mucho en quemar en bebida y una vida poco
decorosa lo poco que habia sacado de su herencia. Asi que, en la
calle, sin una triste moneda de plata y sin alojamiento, recordo que
sus padres le habian hablado de Fay el bardo, y aunque , para que
mentir, la idea de trabajar le repugnaba, penso que el esfuerzo en
formarse valdria la pena, pues en cuanto fuese un bardo , la vida le
vendria regalada. O eso pensaba el!.
Asi
que, se presento ante el anciano Fay, un hombre de larga barba negra
y ojos aun mas oscuros, siempre rodeado de un grupo de aspirantes a
bardo que le veneraban como un maestro.
Entre
los compañeros, y tras ser aceptado y vestido con una tunica de
aprendiz muy modesta (en todo caso, bastante mas pulcra que la
desastrosa ropa que antes portaba, que debido a su vida de absoluta
dejadez, apestaba como un cerdo en su pocilga), escucho que el
anciano bardo, habia transcendido mucho mas alla del arte de la
poesia, sus aprendices hablaban de el con veneracion, decian cosas
extraordinarias de un hombre que, según decian, habia llegado a
conversar directamente con los dioses, y habia recibido de ellos el
poder para obrar mas de un prodigio.
Shean
no se creia nada en absoluto de esas historias, pensaba que un bardo
no era otra cosa que un habil charlatan, un hombre con mucha
habilidad para explotar la credibilidad de los campesinos y aun si
era realmente bueno, las gentes de la clase elevada, contandoles
historias antiguas, o creando relatos donde se exagerasen las
pequeñas gestas de los nobles locales, viviendo asi una vida
regalada por narrar a las gentes justo la clase de cuentos que
deseaban oir.
Pero
lo cierto, es que Fay era un hombre extraordinario, un mistico que
aspiraba a formar no solo buenos contadores de historias, sino a
preparar las mentes de los aspirantes, para percibir otras cosas mas
alla de la buena poesia o el uso de la palabra para tejer buenas
historias.
Fay
aprendio a hablar con los animales y a escuchar todas y cada una de
las señales de la naturaleza, y como buen bardo, aspiraba a que sus
aprendices aprendiesen esas artes, pues el, tras muchos años de
aprendizaje y practica, habia sobrepasado con creces las habilidades
propias de un bardo, ahora estaba preparado no solo para narrar
buenas historias, sino para escuchar los lamentos y problemas del
pueblo, y ofrecerles consuelo, incluso, en algunas ocasiones, para
ser el guia de las sencillas gentes del campo y hacer en su nombre
ofrendas a los dioses.
Una
mañana muy temprano, apenas dos dias despues de que Shean entrase a
formar parte de los aprendices de Bardo, el maestro les ordeno cargar
con una cantara enorme de barro sobre sus cabezas, y seguirle al
rio... Shean no entendia en absoluto nada de lo que sucedia, podia
comprender las largas y aburridas charlas del maestro, a las que
fingia prestar atencion, acerca de como habia que narrar una buena
historia, y como habia que adornarla para ganarse la aprobacion de
las masas que escuchaban...pero ¿¿ acarrear agua del rio en
cantaros de barro??...¿que clase de enseñanza era aquella?.
Al
llegar al rio, el maestro les ordeno llenar las cantaras de agua, y
seguirle cargando con ellas hasta lo mas profundo del bosque, pero
Shean era demasiado vago para esforzarse demasiado, asi que apenas
lleno menos de la mitad de su cantaro... y mientras los demas seguian
al maestro a duras penas, acusando el cansancio de cargar sobre sus
cabezas con los pesados cantaros llenos de agua, el iba riendose por
lo bajo de sus compañeros, pensando “mira a todos estos tontos
siguiendo los caprichos de este viejo, mientras yo voy descansado “.
La
leccion fue larga y sumamente interesante,el maestro Fay hablaba de
los animales del bosque, de como cada uno de ellos tenia su
significado y sus caracteristicas magicas según las tradiciones
seculares del pueblo, y de como era necesario para todo buen bardo,
conocerles a todos, para asi poder comparar a los animales y sus
habitos con los hombres y sus acciones, y asi poder tejer buenas
historias y poemas.
Shean
casi se durmio a lo largo de la extensa charla, hasta que, en un
momento dado, el maestro Fay suspiro profundamente y dijo “bien
alumnos, espero que lo aprendido os sea de provecho, ya que nada mas
os enseñare hoy”.... Despues cerro los ojos, y recito una amplia
cancion con cadencia lenta, en una lengua muy antigua, que los
jovenes no lograron descifrar... tras la cual, solicito un trago de
la cantara de uno de sus seguidores... tras hechar un largo trago,
sonrio y dio las gracias al joven Hagen que siempre estaba atento a
las necesidades de su maestro y exclamo “por el luminoso Goibniu!!,
que sabrosa cerveza!”.
Shean
no podia creer lo que veia, todos los aprendices empezaron a beber de
sus cantaros, y a deleitarse con una sabrosa y excelente cerveza,
mientras que el, apenas pudo hechar mas de tres tragos de su cantaro
casi vacio. Tras esto, todos empezaron a cantar a coro muy alegres
por la medio-borrachera de cerveza, y Shean no pudo mas que fingir
estar tan contento como el resto, y tras tragarse su amargura como
pudo, descansar sediento unas horas a la sombra de un arbol, mientras
los demas dormian la borrachera.
Al
amanecer del dia siguiente, todos volvieron a ser despertados, muy
temprano, y el maestro les ordeno seguirles a orillas del rio una vez
mas, donde todos se bañaron, acabado el ritual de limpieza, el
maestro les ordeno cargar con una piedra del rio y seguirle una vez
mas, esta vez a lo alto de una colina.
Todos
tomaron pesadas rocas del rio, y cargandolas a sus espaldas, subieron
penosamente la montaña. Todos menos el vago de Shean, que tomo una
pequeña y lisa piedra del lecho del rio... y riendose de sus
compañeros, siguio a todos hacia la cima, jugueteando con su piedra.
La
leccion esta vez fue sobre las aves, y una vez mas, el maestro enseño
a sus alumnos acerca de las caracteristicas y costumbres de cada una
de ellas, y de los mitos que el pueblo entregaba a cada especie...
Shean mostro el mismo poco interes de siempre, hasta que el maestro
dio por finalizada la leccion y dijo “que esto os sea de provecho,
porque por el dia de hoy, no hay mas que os pueda enseñar”.
Diciendo
esto, empezo a salmodiar una cancion tan extraña como la del dia
anterior, y pidio a la joven Eileen (la hermosa como el sol) que le
acercase su roca... a duras penas la joven muchacha logro levantarla
y acercarla a su maestro... que tras levantarla sin aparente esfuerzo
y ante todos romper un buen pedazo de ella, la mordio y declaro :
“Por la bella y bondadosa Navia...que pan tan exquisito”.
Como
el dia anterior, Shean se sorprendio al ver como todos sus compañeros
comian hasta hartarse de un buen pan de cebada, crugiente y
aromatico, mientras que el, por vago, hubo de conformarse con poco
mas que un triste bocado y tenderse a descansar tras la comida, aun
con hambres, antes de que el maestro ordenase el regreso, para colmo,
todos cantaban contentos por el camino, y el , muy de mala gana, hubo
de seguir los canticos, aunque se sentia molido de la caminata y muy
hambriento.
Al
tercer dia de su preparacion, apenas salido el sol, el maestro les
ordeno salir al cercado, tomar un cepo de leña cortada, y tras esto,
seguirle... todos tomaron un buen trozo de leña ya cortada, y con
ella bajo el brazo, siguieron cantando a su maestro, todos menos
Shean, que esta vez penso “hoy cuando el viejo cuervo haga su
magia, yo sere el mas favorecido”, asi que, ni corto ni perezoso,
esta vez, tomo un pesado tronco sin cortar, y bufando por el
esfuerzo, siguio a todos a donde quiera que su maestro les llevase.
Anduvieron
por el largo camino que lleva a la aldea, hasta que divisaron la
posada, donde el maestro les ordeno entrar... tras lo cual, ordeno
que todos descargarsen la leña al lado de la chimenea... todos
llegaron mas o menos descansados tras un largo pero agradable paseo,
todos, excepto Shean, que entro bufando y por fin solto su pesada
carga frente a la chimenea.
Durante
toda la jornada, el maestro empezo contando una historia, y tras el,
ordeno a todos los aprendices que contasen una suya, cosa, que casi
todos lograron hacer con éxito, arrancando los aplausos de todos los
congregados en la posada. Todos, menos el mastuerzo de Shean, como ya
hemos dicho, prestaba nula atencion a las lecciones de su maestro,
asi que, poca gracia encontraron los oyentes en una penosa historia,
mal contada y sin gracia alguna.
Acabadas
las historias, todos recibieron en premio buena cena, y buena bebida,
y por supuesto alojamiento para pasar la noche calientes...todos,
menos Shean, que avergonzado por su pesima actuacion, no se atrevio a
reclamar cena ni posada...hubo de acostarse en el establo, entre los
animales, y dormir con el estomago vacio...
Al
amanecer del cuarto dia, nada se sabia de Shean...dicen que aprendio
una dolorosa leccion, no logro llegar nunca al grado de bardo, y se
dice que acabo sus dias como leñador , eso si, uno dedicado, y el
mejor de toda su cuadrilla. El sueldo no era mucho, y la comida no
era la mejor, un plato de gachas calientes y un trago de vino aguado
fresco...pero dicen que dada la energia que Shean empleaba en el
manejo de su hacha, nunca le faltaron desde entonces ni las gachas,
ni un buen lecho, ni un trago de vino fresco... lastima que se paso
la vida añorando la vida regalada de los bardos … y todo por su
dejadez de antaño y no querer escuchar la voz de Fay, el maestro
cuervo.
Un
día, mientras los dioses del Asgard celebraban un banquete al que
habias sido comvocados en el palacio de Aegir, el dios del
mar,sucedio una de las mas fantasticas historias que puedan contarse
acerca del poderoso dios del Trueno.
Ran
y su esposo Aegir, estaban preparandolo todo para el gran banquete,
tenian el amplio salon preparado y todos los bancos habian sido
dispuestos para alojar a todos los dioses que se darian cita en el
gran festin.
Ran
engalano lo mejor que pudo a sus 9 hijas, Himinglæva,
Dúfa, Blódughadda, Hefring, Udr, Hrönn, Bylgja, Dröfn, y Kólga,
pues ellas serian las encargadas de servir los cuernos de bebida, tal
y como solian hacer las valkirias en el gran salon de Odin. Y de
todos era sabido que las hijas de la diosa de los mares eran muy
hermosas. Asi que ningun comensal podria desear ser servido por damas
mas hermosas que ellas.
Sin
embargo, cuando todo parecia bien dispuesto para el banquete, se
dieron cuenta de que les faltaba una caldera de aguamiel que fuera lo
suficientemente grande para poder fabricar hidromiel en cantidad
suficiente para saciar la sed de todos los dioses que iban a
presentarse en el gran salon.
Thor
habia acudido al palacio de Aegir como supervisor del banquete y se
ofrecio a buscar una buena caldera para solucionar el problema, pero
tras largos dias de busqueda, hubo de admitir su fracaso en la
mision.
Asi
que regreso al Asgard para comunicar que el banquete se retrasaria y
reunio a los dioses para encontrar la solucion al problema, cuando
todos guardaban silencio, el valeroso dios de la guerra Tyr, se
levanto y dijo sonriendo: "¡Tengo la solución! Mi padre ,
Hymir, tiene una caldera de una milla de profundidad, supongo que ha
de ser suficiente para colmar las necesidades del gran cervecero de
los dioses."
Nada
más oír esas palabras, Thor salto de su asiento y euforico se puso
en pie, agarró a Tyr por el brazo y ambos se pusieron de inmediato
en camino a la frontera del cielo, para ir a ver al gigante Hymir.
Al
llegar, vieron que el gigante no estaba en casa, cosa que alegro a
Tyr, pues gigantes y dioses no se llebaban demasiado bien, en
especial con el poderoso Thor, pero igualmente, alguien salio a
recibirles y su doncella (la madre de Tyr), ayudó a los dioses a
lograr su objetivo y los escondió debajo de la caldera hasta la
caida del dia.
Al
caer la noche, Hymir regresó a su morada , cansado de su día de
caza. Su barba estaba completamente helada, parecía un bosque de
carambanos de hielo.
Su
esposa se apresuro a recibirle y tras saludarle, le dijo que vinieron
su hijo acompañado de Thor a visitarle, y acto seguido, nada mas
escucho el nombre de Thor, el gigante Hymir entro en colera y se
puso a buscarles por todas las habitaciones. Con su mirada se abrían
las pilastras y las vigas, se rompían siete calderas y solo una
quedó indemne al fuego de su colera: aquella debajo la cual se
escondían Tyr y Thor.
Al ver el panorama desolador que estaba
dejando en casa de Hymir, ambos dioses optaron por salir y dar la
cara e Hymir reconoció al archienemigo de todo gigante: Thor.
Pero
debido a que era un buen hombre y a que respetaba el protocolo , ya
que habeis de saber que los escandinavos siempre han sido muy
hospitalarios, tuvo que contenerse en su rabia e hizo que les
preparan comida y cortesmente, se disculpo por su mal carácter,
invitando a ambos dioses a sentarse a la mesa para compartir la cena.
Pero
fue en esta cena donde nuevamente, haciendo gala de su voraz apetito,
Thor volvió a comer como si no hubiera mañana: de los tres bueyes
que cocinaron, él solito se comió dos, tras lo cual alabo a la
esposa y al gigante por lo que consideraba “una gran cena”.
Sin
embargo al gigante no le hizo mucha gracia el alago, pues el gloton
Thor le habia dejado sin existencias de comida, por lo cual a la
mañana siguiente se tuvieron que buscar más provisiones, pero Thor
dijo que ya que el mismo habia causado el problema, en persona se
encargaria de resolverlo, procurando el mismo provisiones, en este
caso, pescado.
Thor
insistió en acompañar al gigante a pescar, y como cebo se llevó
la cabeza del tercer buey de la cena de Hymir.
Thor
, remaba feliz en el bote y avanzaban a gran velocidad por el mar
rumbo al caladero de pesca. Al llegar, tanto el gigante como Thor
echaron al mar los anzuelos con sus cebos y mientras el gigante iba
pescando ballenas y algun tiburon, el anzuelo de Thor fue mordido por
algo aun mas grande, se trataba de la serpiente de Midgard,
Jörmangandr (cuando Thor pesca, como todo lo que hace, lo hace a lo
grande...).
Mientras
Thor iba tirando con su enorme fuerza del cebo, el mar se iba
encrespando como si una enorme tormenta se avecinase, y esta vez, el
señor del Trueno, nada tenia que ver con esto.
Hymir
al principio estaba muerto de envidia porque la pesca del
matagigantes era más grande y espectacular que la suya, pero cuando
vio emerger de las aguas, la enorme cabeza de la gran serpiente
Jormundgandr que luchaba con ira para escapar del enorme anzuelo,
espumando por la boca enormes torrentes de veneno y levantando olas
enormes a su derredor, empezo a asustarse enormemente.
Pero
Thor no estaba asustado en absoluto, debio pensar contento “al fin
un adversario a mi talla y altura”, y cuanta mayor era la fuerza
con la que tiraba la serpiente, mas fuerte tiraba el, manteniendo
ambos titanes, dios y serpiente un duelo tremendo en el oceano.
Pronto
las olas eran tan grandes como montañas y el asustado gigante penso
que si no se libraban de la serpiente , esta acabaria por hundir el
bote y ahogarles a ambos en el oceano,asi, que, reuniendo todo el
poco valor que aun le quedaba, se levanto del suelo de la barca y con
un hacha cortó el sedal de un golpe seco, y de esta forma el
monstruo volvió a hundirse en el mar.
Thor
no se tomo nada bien su derrota, y se paso el camino de regreso
reprochando la cobardia del gigante, y comentando que solo debia
estar vivo a su hospitalidad y a que era familia de su buen amigo
Tyr.
De
camino a casa de Hymir, Thor cargó a cuesta scon el barco y las
ballenas que había pescado el gigante, el cual a pesar de verse
superado en fuerza y visiblemente atemorizado por el carácter del
dios Thor que estaba a punto de reventar de ira, seguía negándose a
darle la caldera.
Para
librarse de el de una forma mas o menos digna, le sugirió a Thor el
reto de romper un vaso de cristal de roca de la montaña de los
gigantes.
Ni
que decir tiene que el dios del trueno acepto el reto , Thor empezó
a tirar el vasocon fuerza al suelo, apretarlo con sus manos, saltar
encima de el... pero nada parecía funcionar para romper el vaso,
hasta que la madre de Tyr, la cual estaba bastante cansada de ver
que el gigante no la ayudara con las tareas del hogar y temiendo que
el fracaso acabase por encolerizar todavia mas a Thor, en secreto le
reveló el truco para conseguirlo y le dijo: "Prueba a tirar el
vaso a la cabeza del holgazán de mi marido, pues solo su cabeza es
mas dura que ese cristal".

Thor,
sin dudarlo ni un segundo tomo el vaso en sus manos y lanzandolo con
todas sus fuerzas, hizo como la buena mujer le indicó y
efectivamente el vaso se rompió,estrellandose contra la cabeza del
gigante que quedo aturdido por el golpe, por lo cual Hymir no solo
perdió el conocimiento por unos segundos sino también su
queridísima caldera.
Tyr quiso ayudar a Thor a cargar con la
caldera, pero no pudo pues el dios del trueno ya la habia levantado
sin esfuerzo. Al ver a su compañero mirando asombrado tal azaña,
Thor le dio una palmadita amistosa en la espalda y tras darle las
gracias le espetó "no te preocupes, ya me encargo yo" y
tras ponerse la caldera encima de su cabeza como si se tratase de un
caldero de agua fresca del rio, ambos amigos iniciaron su camino de
vuelta al palacio de Aegir.
Cuando
Hymir recuperó el conocimiento, llamó a su gente y salieron en
busca de Thor,y Tyr que iban despacio por el camino, pues ambos iban
comversando amigablemente sobre el suceso con la gran serpiente, y
para variar, Thor estaba burlandose de la cobardia del gigante, al
que hechaba la culpa de no haber podido pescar a la gran bestia.
No
tardaron en oir a sus espaldas un enorme griterio. Y el primero en
volverse fue Thor, el cual al darse cuenta de la que le venía encima
dejó la caldera en el suelo y comento a su compañero con sorna
“vaya, parece que haremos ejercicio antes de la cena”.
Ambos
amigos sonrieron y el uno a martillazos, el otro a golpes de espada,
despacharon a no pocos gigantes antes de que los menos, se diesen
cuenta de que o corrian como el viento, o acabarian todos muertos, y
huyesen a la carrera.
Afortunadamente,
el hidromiel y la fiesta calmaron pronto la fu. Se promeytria del
dios Thor, aunque mientras miraba de reojo a las hermosas hijas de
Ran que le sonreian mientras llenaban su cuerno de hidromiel una y
otra vez, se prometio que algun dia daria caza a la gran serpiente...
y mientras sonreia y vaciaba de un trago un cuerno mas, decidio “la
proxima vez no se me escapa”.
Pedro
Chosco es un duendecillo muy popular entre los pequeños de Galicia y
Asturias. Se trata de un ser muy silencioso, generalmente se le
representa como un hombrecillo de barba blanca, suele ser de
maneras dulces y se dice que su voz es grave y que se encarga de
dormir a los niños con suaves caricias y nanas.
Los
niños ven al duendecillo llamado Pedro Chosco cuando estan cansados
despues de todo un dia de juegos, pero como todos los niños
pequeños, aun desean prolongar un poco mas el dia. Cuando llega el
anochecer, los peques estan ya rendidos y tienen un ojo cerrado y el
otro casi no lo pueden abrir.
A
los niños gallegos y astures seguro que alguna vez nos han dicho al
ver que llega la hora de ir a buscar el calor de las sabanas en la
cama y ya nos caemos de sueño , mientras nos llevan a la
habitacion, “Ya anda por ahí Pedro Chosco”.
Es
una metáfora del sueño, un duendecillo que ha evolucionado mucho
con la fantasia de los mayores, en especial los padres y abuelos que
se encargan de adornar las historias acerca del duende para los mas
pequeños.
De
carácter siempre amable y de voz dulce y muy pausada, se dice que
sus nanas son magicas y tienen el poder de dormir a quien las
escucha. Se tiene por la representación del sueño y se dice que es
grande su amistad con los niños de todo el mundo.
Pero,
también se dice de él que hace dormir, o les da pereza, a las
mujeres que sirven en la casa, siente predileccion por las
jovencitas, y a veces se esconde para cantarles nanas, impidiéndoles
hacer sus labores, pues logicamente las doncellas se duermen en su
trabajo. En otros casos, quizá no haga que estas mujeres caigan
dormidas realmente, sino que las entretiene con otros trucos ya que
tiene fama de ser un gran conquistador de chicas.
Una
cantiga (cancion) popular Gallega dice:
” Vaite
de aí Pedro Chosco
non
me tentes a criada;
nin
ma vistes, nin ma calzas
nin
lle pagas a soldada.”
TRADUCCIÓN:
“Vete
de ahí Pedro Chosco
no
me seduzcas a la criada;
ni
me la vistes, ni me la calzas
ni
le pagas el jornal.”
En
los dichos populares de la lengua galega, aparece en algunos
refranes y expresiones también la referencia a este ser mitológico
gallego:
El
sueño, cuando tienta, ó acomete, á alguno. “A este tentouno
Pedro Ch
También
hay constancia de referencias al personaje en canciones infantiles
antiguas:
Pedro
chosco é meu amigo
que
me vén a visitar.
Cando
Pedro Chosco vén
horas
son de me deitar.
TRADUCCIÓN:
“Pedro
Chosco es mi amigo
que
me viene a visitar.
Cuando
Pedro Chosco viene
horas
son de acostarme.”
Otra
de las manifestaciones en canciones de índole más bien infantil:
“Pedro
Chosco
e
mais Langaña
andan
xuntos á porfía.
Pedro
Chosco anda de noite
e
Langaña anda de día.”
TRADUCCIÓN:
“Pedro
Chosco
y
mas Legaña
andan
juntos siempre en competencia.
Pedro
Chosco anda de noche
y
Legaña anda de día.”
Por
supuesto, como duende del sueño es tremendamente poderoso y sus
poderes son grandes, puede hacerse invisible, y asi se sienta al lado
de la cabecera de la cama de los mas peques, para cantarles o
susurrarles despacito hasta que se duermen. Otros aseguran que tiene
aun poderes mas asombrosos, como el de poder comvertirse en gato, asi
el gato se acerca a la cama de los peques, y maulla o ronronea muy
suavecito hasta que los peques acaban durmiendose.
Otros
aseguran que puede cambiar de apariencia, muchas veces se disfraza de
muñeca para dormir a las niñas, o del juguete favorito de los mas
pequeños. Aunque una de las cosas que se cuentan sobre el , mas
sorprendentes es la de su tacto calido, dicen que toca despacio las
sabanas de la cama de los niños y asi su calidez pasa a las sabanas,
lo que es muy agradable, otros dicen que es su aliento el que es
calido y suave como el calor de una vela.
Hay
algunos cuentos muy antiguos sobre Pedro Chosco, como el que dice que
su oido es muy sensible, algunos dicen que puede oir el bostezo de un
niño a muchos kilometros de distancia, aunque algunos dicen que son
los propios niños los que tienen el poder de invocar al duende que
aparece en cuanto les llega la hora del sueño.
Otra
historia tambien muy extendida es la de que Pedro Chosco domina a la
perdeccion “as mañas do gato e do rato” ( las habilidades del
gato y el raton), esto quiere decir que es silencioso , lo necesario
para entrar en la habitacion de los mas peques, cumplir su mision de
traerles un sueño dulce, y retirarse sin hacer ruido que los
despierte.
Por
ultimo, tambien comviene contar que Pedro Chosco tiene como todo gran
duende magico, un enemigo, algunos dicen que tiene un hermano gemelo,
que disfruta asustando a los niños en las noches, les trae malos
sueños y hace que no puedan dormir, aprovechandose de algunos
momentos en los que todos los niños son mas debiles y vulmerables,
por ejemplo cuando estan malitos. A este personaje tan desagradable,
le conocen como Lelo Pesadelo.
Pero
Pedro Chosco es listo, y cuando presiente que Lelo pueda andar cerca,
busca la complicidad de los mayores, que velan el sueño del pequeño,
de esta manera, en el poco probable caso de que Lelo consiga colarse
y traer un mal sueño, papa o mama, o el abuelo o la abuela estaran
siempre cerca para calmarnos y quitarnos el susto con un abrazo y un
beso.