Igor, el perro de los Rus.
Publicado por HEATHENPRIDE , domingo, 20 de octubre de 2019 6:35
Dice
la leyenda que sucedió esto que voy a narrar en las frias tierras de
los Rus , durante el mandato del gran Yaroslav. Por ese entonces,
vivia entre esas gentes , los curtidos hombres del norte que se
hacian llamar los Rus, un joven de clase humilde, el menor de 5
hermanos, al que la leyenda atribuye el nombre (poco probable) de
Igor.
Sea
como fuere, nos quedaremos con ese nombre. A la muerte de su padre,
tal y como era costumbre, se repartio la herencia entre sus hijos,
llevandose la mayor parte el mayor de ellos, por ser considerado el
mas capaz de dirigir la granja, a condicion de que prometiese acoger
a sus hermanos mientras estos no alcanzasen los medios para forjarse
sus propias vidas.
Pero
Igor tenia mejores planes que pasarse su vida sirviendo a su hermano
mayor, asi que, rechazo quedarse con su hermano en la granja y con lo
poco que le correspondia de la herencia, se marcho a buscar una nueva
vida lejos de la pequeña propiedad que hasta entonces habia sido
todo lo que habia conocido.
Con
solo una vieja mula, un pequeño puñado de plata picada y la ropa
que vestia como unicas posesiones, no tardo en vagar de aquí a alla,
buscando trabajo en lo que fuese, demasiado orgulloso para regresar a
casa con la cabeza gacha y reconocer su fracaso ante sus hermanos.
Fue
una noche cuando tomando la peor cerveza y el peor plato en una sucia
fonda, lo unico que podia permitirse pagar, conocio a un grupo de
extranjeros que fanfarroneaban de la buena vida que iban a vivir en
cuanto entrasen a servicio del buen jarl del kanato de los Rus. Como
fuere que los hombres ya estaban bastante bebidos y le vieron alli
solo en una esquina, le propusieron compartir su mesa, y asi fue,
como Igor entro a formar parte del pequeño grupo, mas tarde sabria
que eran mercenarios que buscaban entrar al servicio de Yaroslav, el
lider de los Rus que siempre estaba buscando nuevos guerreros.
En
un principio, hubo de aceptar el rol de siervo en el grupo, hacia las
veces de escudero, preparando los caballos y manteniendo siempre
limpias las armas y escudos, pero, poco a poco, empezo tambien a
absorver las lecciones de sus compañeros, y a hacerse con cierta
habilidad en el uso de las armas.
Cuando
el grupo ofrecio sus servicios a Yaroslav, y juro lealtad al
caudillo, el fue aceptado como uno mas, aun con el bajo puesto de
escudero, pero los siguientes años de servicio, le sirvieron para
subir rapidamente de escalafon.
Tras
la primera campaña, donde le toco defenderse como guerrero, proto
demostro destreza con las armas y enseguida logro comprarse con su
primera soldada, un buen caballo y su primer equipo de guerra. Y las
siguientes campañas no hicieron sino mejorar su estima entre las
tropas.
Como
si Igor hubiese nacido para aquella vida, en poco tiempo, paso a
comandar un pequeño grupo de hombres, que bajo su liderazgo,
llegaron a ser una de los mas notables grupos de combate entre el
ejercito de los Rus. De ahi a llegar a ser uno de los mejores hombres
de confianza de los caudillos de los ejercitos Rus, solo fue cuestion
de tiempo.
Conforme
subia su status entre los fieros Rus, tambien subia su fortuna y fama
, hasta que llego un dia en que su reputacion fue tan alta, que el
propio Yaroslav, le reclamo a su presencia.
Por
ese entonces, Igor ya poseia una casa propia en la gran corte de los
Rus, y tenia una sierva , Ylana, una mujer ya entrada en años, pero
sabia y discreta, que no se asombro ante el requerimiento de Yaroslav
cuando este envio a sus siervos a buscar a Igor.
La
siempre prudente anciana, se dispuso a preparar las mejores galas de
su señor, y mientras este desayunaba antes de presentarse ante el
gran lider Rus, se permitio darle un consejo que nadie le habia
solicitado. “Cuidate de la adulacion y la servidumbre. Pueden ser
buenos medios para medrar rapido y obtener fortuna, pero al final no
son mas que una cadena. Cree el perro que es libre si tiene la cadena
larga y el plato siempre lleno... pero su felicidad se acaba cuando
es consciente de la cadena que le ata y de lo que pesa”.
Igor
ni se molesto en castigar a la deslenguada anciana, en el fondo, la
apreciaba casi como a la madre que perdio demasiado pronto, siendo
casi un niño... Y hizo oidos sordos a la advertencia, y el tiempo se
encargaria de hacerle ver su error.
Yaroslav
le ofrecio formar parte de sus generales, de sus hombres de maxima
confianza, pero eso significaba juramento de absoluta lealtad y que
cumpliria sus ordenes, siempre...fuesen estas las que fuesen.
Asi,
la vida de Igor paso a ser regalada, tenia todo cuanto pudiese
desear, plata, bienes, y varias esclavas... pero pronto entendio que
ese nivel de vida suponia tener que mancharse las manos de sangre, no
siempre de enemigos justificados, perpetrar robos y otras atrocidades
a la orden de su señor sin poder cuestionar nunca nada de nada.
Dice
la leyenda que llego un dia en que le presentaron a una joven que le
dijeron que seria su esposa, una desdichada que era hija de un
caudillo vencido, a la que se tenia como rehen para matener sumiso a
su padre. Evidentemente, ni el la amaba a ella, ni podria pretender
nunca que siendo el responsable de arrasar su aldea, ella le amara. Y
sin embargo, ahorrandonos los detalles, hubo de concebir un hijo con
ella por orden de Yaroslav, esa era la garantia de que el pueblo
vencido no se sublevara.
Asi,
poco a poco, y con los años, la profecia que ocultaba el consejo de
la anciana Ylana, se fue haciendo cada vez mas palpable, Igor tenia
todos los lujos reservados a solo unos pocos, pero vivia en una
familia sin amor, junto a una esposa impuesta que no le amaba. De su
hijo nada sabia, tan solo que estaba al cuidado de unas nodrizas,
lejos de su propia madre, y esto era solo una parte del peso que su
conciencia acarreaba.
Ya
habia perdido la cuenta de las ciudades que habia saqueado, de los
cientos de aldeas quemadas, de las ristras de jovenes arrastrados
hacia la esclavitud.... pronto se dio cuenta de que se habia
comvertido en el perro de Yaroslav... y que la cadena que le ataba
era demasiado pesada y larga.
Y
tal y como la sabia Ylana le habia predicho, en cuanto fue consciente
de que existia la cadena, ya fue del todo incapaz de soportarla, cada
nueva orden de su señor era un peso enorme en su conciencia, y
pronto sintio que el peso de la cadena le extrangulaba.
Asi
que , fue casi una liberacion cuando le ordenaron atacar una gran
ciudad, como parte de una tropa mercenaria, el montante en oro era
importante, y Yaroslav no iba a dejar pasar la oportunidad de tan
importantes ganancias. Si como esperaba , la campaña resultaba
victoriosa, añadiria al pago por sus tropas, el botin de la ciudad
saqueada.
Igor
se planto en primera linea de combate, dicen que luchaba con arrojo,
despreciando su propia vida, anhelando en secreto la flecha o la
hoja que le matase, fuese de espada, hacha o lanza.
Y
asi, amigos acaba la historia, Igor se vio libre de su cadena al fin,
aunque no de la forma mas deseada.
“Cree
el perro que es libre y tiene ansias de correr, cuando la cadena es
muy larga, y como el pajarillo se siente alegre y contento, dentro de
su jaula de plata. Pero la alegria se acaba en el momento en que el
pajaro descubre los barrotes, y el perro el collar que le une a la
cadena que le amarra....Por eso vivid siempre huyendo de la adulacion
y los placeres faciles que se os ofrezcan , pues son los barrotes y
las cadenas que os amarran... y tarde o temprano descubrireis que no
hay jaula lo suficientemente amplia para que os sintais libres..y que
nunca la cadena es lo suficiente larga”-